Durante E3, los desarrolladores del Xbox One se apoyaron en NASA para mostrar los altos límites que puede alcanzar el simple poder computacional de la consola. En general, el demo es proyecto del programador Frank Savage que con un equipo comenzó a experimentar en el sistema para buscar un “set enorme de datos”.
Según Savage, se buscó la ayuda de NASA porque “tiene un sistema de datos muy bueno” y explicó que “tiene registrado a cada cuerpo celestial en el sistema solar incluyendo planetas, lunas, asteroides y cometas”. El demo consiste en una simulación del espacio basada en datos de 35,000 años luz y se rastrea la posición, velocidad y trayectoria de órbita de cada asteroide existente entre Marte y Plutón. Lo importante del proyecto es que los asteroides son calculados y simulados con un nivel de exactitud muy alto.
Geoff Henshaw de Microsoft explicó que el sistema tiene la habilidad de mostrar 10,000 o 100,000 enemigos en el juego mientras retiene un nivel de realismo y fluidez impresionante. Al comparar el poder de este sistema con el de las consolas de generación anterior, Henshaw dijo que para obtener el mismo resultado se necesitarían “10 Xbox 360 y medio funcionando al mismo tiempo”.
Hay 500,000 actualizaciones por segundo desde la nube al Xbox One y eso hace que los desarrolladores puedan computar 330,000 asteroides en tiempo real. Henshaw insiste que así es como la nube puede cambiar la experiencia de juego y que Microsoft a penas está explorando la superficie de lo que en verdad se puede lograr. Una colaboración entre NASA y Xbox resulta muy interesante aunque por el momento sólo haya sido para comprobar el enorme poder que tiene la nueva consola.
Referencia: Examiner