Los videojuegos han evolucionado enormemente. En los años 80s del siglo pasado, los jóvenes y niños tenían que ir a locales comerciales donde había máquinas para poder jugar los juegos de moda. Tiempo después aparecieron las primeras consolas de videojuegos, como la Atari y probablemente poco a poco, con los años, con las mejoras en hardware y software, el negocio de las “maquinitas” empezó a decaer hasta convertirse en algo del pasado.
Sin embargo, hay quienes aún juegan los videojuegos en aquellas máquinas en donde había que depositar monedas a las mismas para poder jugar. Lo sorprendente sin embargo, es que hay quienes luchan por tener aún el más alto registro en puntuación en algún juego ya emblemático como por ejemplo, Donkey Kong.
Wes Copeland, es un jugador absorbido por este reto y en enero de este mismo año marcó una puntuación enorme, la cual significaba quizás la más alta jamás antes puesta en este juego del Donkey Kong, pero en abril perdió el primer lugar. Sin embargo, volvió al ataque y logró una nueva puntuación de 1,218,000 puntos, el 5 de mayo pasado. Esta es una puntuación 28,200 puntos mejor que la de Robin Lakeman (la puntuación de abril mencionada). Es 11,200 puntos mejor que la de Dean Saglio, que impuso una puntuación que parecía también imposible de vencer.
Para ganar en este juego, Copeland no perdió una sola vida de Mario en el juego. Tomó su primera vida y de ahí en adelante llegó a realizar todos los niveles, lo que en principio estaríamos ante una marca perfecta.
Wes Copeland dijo en Facebook: “esta será mi última puntuación récord”, y agregó “no creo que se puedan sumar más puntos que estos”. Copeland había definido como su última meta en Donkey Kong la suma de 1.2 millones y dijo que se retiraría de la competencia si lograba esta puntuación. Lakeman respondió a Copeland indicando que “no tengo la suerte suficiente. Tengo buena suerte pero no la suficiente”.
Donkey Kong se lanzó como juego en 1981 y probablemente es el videojuego más jugado de la historia en donde surgió una extraña idea de tener la puntuación más alta posible a nivel mundial. En un documental del 2007, se hizo la crónica entre Steve Wiebe y Billy Mitchell, los cuales hoy ocupan los puestos 18 y 19, respectivamente, de los mejores tiempos de la historia del juego.
En el 2010 un doctor de Nueva York, Hank Chien, se hizo del récord y repitió en el 2011 antes de que apareciese la rivalidad entre Lakeman y Copeland, que hizo que el récord mundial cambiara de manos muchas veces en cuatro años.
He aquí el video del récord de Copeland, que le llevó más de 3 horas con 20 minutos.
Referencias: