La nueva consola de Microsoft, que se espera sea anunciada en un evento el 21 de mayo, podrá controlar las pantallas y set top box (receptor de la señal de TV de paga) que los usuarios ya tienen en casa por medio del cable HDMI, lo que hará que Xbox sea un centro de medios desde el que se tendrá acceso a nuevas funciones interactivas.
Según reporta The Verge, la siguiente generación de Xbox podrá integrarse con el servicio de TV de paga de forma que en la pantalla aparecerá una interfaz personalizada por Microsoft desde donde el usuario podrá elegir qué ver; esto se fusionaría con otras características de Xbox para dar una mejor experiencia de usuario.
Un ejemplo de qué tan profunda sería dicha integración es que, supuestamente, Kinect reconocerá los rostros de quienes estén al frente viendo el televisor y, en caso de que el usuario deje la habitación o centre su atención en otra cosa, pausará la reproducción de contenido.
Para lograr ofrecer un funcionamiento enriquecido, Microsoft tendría establecidos contratos con proveedores de contenido, de forma que esta característica no se vea limitada por algún tipo de incompatibilidad; también se piensa que esta será una más de las aplicaciones por las que el nuevo Xbox tendrá que estar conectado todo el tiempo a Internet, como se había revelado previamente.
Finalmente, al utilizar esta nueva característica en Xbox, Microsoft establecería el terreno adecuado para el momento en que decida lanzar la supuesta versión de la consola que no será compatible con videojuegos, pues estaría centrada únicamente en la reproducción de medios.
Este tipo de integración entre consola y TV ya se ha visto en otros casos, como PlayStation 3, donde el usuario puede controlar la interfaz con el control remoto de la pantalla (sin importar que no sea Sony) siempre y cuando se utilice un cable HDMI para conectar dichos dispositivos. No obstante, Microsoft iría más allá al juntar en un mismo espacio el nuevo gadget y el servicio de TV de paga.
Referencia: The Verge