Este fin de semana el Comité Olímpico Internacional se reunió para discutir si los «eSports», los videojuegos, podrían ser parte de los Juegos Olímpicos. ¿El veredicto? Es prematuro discutir incluirlos en los juegos olímpicos y esto podría tardar mucho.
Por supuesto que para los que apoyan esta idea, se esperaba un cambio radical en la manera de pensar por parte del Comité Olímpico, de manera que se incluyeran estos videojuegos para París 2024. Fue Tony Estanguet, copresidente del Comité Olímpico de París, el proponente de llevar los videojuegos a la plataforma olímpica. Y aunque sí se rechazó la idea, los organizadores de las olimpiadas no están cerrados totalmente a esta posibilidad.
El Comité Olímpico Internacional estuvo de acuerdo a mantener relaciones continuas con la comunidad de los videojuegos. Se dijo, sin embargo, que muchos títulos no son compatibles con los valores olímpicos, presumiblemente refiriéndose a los juegos de violencia o de disparos. Así, el Comité Olímpico Internacional hizo un contraste entre cómo la industria de los eSports se maneja comercialmente a lo opuesto, el sentir de los juegos basados en ciertos valores que no parecen ser compatibles con algunos de los que hay ahora. Sin embargo, el Comité dijo que planea invitar a los responsables de los eSports de forma que se haga alguna alianza para explorar de forma conjunta algunos posibles proyectos.
Los eSports parecen no encajar en las Olimpiadas tradicionales pero hay que reconocer que muchos deportes entraron con cierto escepticismo. Para el 2020 harán su aparición 5 nuevos deportes, como el de «skateboarding», que sin duda tendrá mucha aceptación entre los jóvenes. Y esto bien podría ser el argumento para convencer al Comité Olímpico. Se sabe que, por ejemplo, los que siguen las olimpiadas, ya sea en línea o por medios electrónicos más tradicionales, están siendo reemplazados por los torneos tradicionales de dichos deportes. Por eso quizás se busque inyectar interés incluyendo en algún momento los videojuegos.
Como sea, el Comité Olímpico tiene tiempo para cambiar de opinión, lo cual podría ocurrir cuando terminasen los juegos olímpicos del Japón.