Es francamente sorprendente lo que se puede hacer con la electrónica en estos días. Kevin Beates decidió embarcarse en un proyecto impresionante en muchos sentidos, pues implica usar pantallas pequeñas, programar un juego de Tetris y todo esto para poderlo jugar en un ardubrazalete, como decidió llamarle. El resultado es en mi opinión, fantástico.
Esto es quizás parte de esta nueva moda llamada «wearable» (vestibles), en donde la gente ahora porta con sus ropas todo tipo de artiluguos electrónicos. Puede ser un anillo que reconoce texto, por ejemplo, o bien una corbata que avisa cuando la gente se aproxima mucho a quien la porta. Las posibilidades tienen como límite la imaginación de cada quien.
El sistema de Kevin contiene tres pantallas OLED súper brillantes, en un circuito flexible con botones conductivos para mantener el diseño minimalista. En lugar de usar una correa para la muñeca, Kevin decidió usar imanes para colocar el dispositivo en su lugar. Por cierto, la batería que da energía a la idea de Kevin puede durar hasta 10 horas.
El corazón de este circuito flexible es un microcontrolador Atmega328p, el cual es el mismo chip que se usa en ArduBoy, un juego tipo GameBoy, del tamaño de una tarjeta de crédito. El Ardubrazalete es el primer prototipo y está planeando ya su creador una nueva versión con soporte a Bluetooth (imaginen jugar Tetris a la distancia) y con algunas partes impresas en 3D para que se vea mejor en términos de producto final.
El siguiente video muestra el dispositivo de Kevin Beates:
Referencias: