La empresa Improbable, con sede en el Reino Unido, ha anunciado junto con Epic Games (que opera el motor de juegos Unreal y que es el creador de Fortnite), un fondo de 25 millones de dólares, diseñado para ayudar a los desarrolladores a moverse a «motores más abiertos».
En un mensaje de blog, escrito por el CEO de Epic Games, Tim Sweeney y el CEO de Improbable, Herman Narula, dicen: «Para apoyar a los desarrolladores que se han quedado en el limbo por el nuevo motor y las incompatibilidades en el servicio que fueron introducidas hoy, Epic Games e Improbable han establecido un fondo de 25 millones de dólares para ayudar a los desarrolladores a una transición a motores de juegos más abiertos, servicios y ecosistemas. Este fondo combinado viene de una variedad de fuentes, incluyendo Unreal Dev Grants, Improbable developer assistance y Epic Games Store funding.
La pugna se dio cuando Unity decidió quitar la licencia de uso a Improbable, que escribió públicamente: «Ustedes [Unity], son increíblemente importantes para nosotros y un mal día no puede tirar por la borda todo los que nos han dadeo. Arreglemos esto para nuestra comunidad. Ustedes saben nuestro número».
Pero Unity, por su parte, dice que le dio a Improbable una amplia nota sobre cómo estaban violando los términos de su servicio. Tim Sweeney, el CEO de Epic Games, dijo en Twitter (@TimSweeneyEpic): «Presumiblemente esto es un error del borrador de un abogado que no tiene idea cómo trabajan los motores de juegos, y Unity lo corregirá a la brevedad».
Sweeney también indicó en Twitter: «Esto hace sobresalir un punto: un ecosistema con Unreal, Unity o Godot, viven y mueren con las reglas que se establecieron. Los desarrolladores han puesto años de sus vidas construyendo algo y nada es peor que cambiar las reglas y confiscar sus inversiones».
Esto es un ejemplo de usar software propietario y las consecuencias que pueden ocurrir cuando se ventilan las diferencias. Más allá de esta discusión, un motor de juegos abierto no es mala idea nunca.