El traer de vuelta a la PlayStation Classic Mini parecía una buena idea y lo era hasta que comenzaron a incluir juegos que la mayoría de los usuarios no quería.
Esta situación basto para causar el disgusto de muchos, incluso el de varios hackers que lograron introducirse en el sistema de la consola para cargarle varios juegos que realmente eran necesarios para disfrutar de un buen rato.
De acuerdo con la información de Ars Technica, la manera en que los hackers lograron inmiscuirse fue sumamente sencilla: a través de una USB, sí, así tal cual se lee, no se usaron programas especializados ni infiltrados en el personal.
Con la USB y gracias a que la empresa escondió la clave para descifrar sus elementos de software en el propio dispositivo, es como se lograron desencriptar los juegos y agregar todos aquellos que se consideraban faltaban, como Crash Bandicoot.
La información del código dio a conocer que Sony probó cerca de 36 juegos más de los que tenía previstos, entre los cuales estaban: Crash 2, Driver, Gran Turismo, Grand Theft Auto 2, PaRappa the Rapper, Silent Hill, Tomb Raider 1 y 2, Tony Hawk’s Pro Skater 2, por mencionar algunos.
Sin embargo, se desconoce si éstos aun estén en la consola de manera oculta, por lo que habrá que esperar a que Sony emita su comunicado oficial sobre dicha situación.