En la nueva batalla que se avecina entre Xbox y PlayStation, Microsoft acaba de asestar un golpe fulminante con el anuncio de la adquisición de ZeniMax, la compañía dueña de Bethesda Softworks.
En pocas palabras, Microsoft ahora es propietaria de sagas como DOOM, The Elder Scrolls, Fallout, Rage y Quake.
El anuncio de esta adquisición de inmediato nos hace asumir que las futuras entregas de todas estas franquicias llegarán en exclusiva a Xbox (y definitivamente es un aspecto que para muchos implicará irse con la plataforma de Microsoft).
‘Con la adquisición de Bethesda, metafórica y literalmente duplicamos nuestra capacidad de contenido de juegos’, dijo Satya Nadella, CEO de Microsoft, en entrevista con Bloomberg.
Pero acerca de la exclusividad de las IPs de Bethesda, Phil Spencer -cabeza de Xbox- compartió también a Bloomberg dos puntos que serán de interés para quienes sigan de cerca los juegos de este publisher.
El primero está relacionado con la exclusividad temporal que Bethesda tiene pactada con PlayStation por lo que hace a sus futuros lanzamientos Deathloop y Ghostwire: Tokyo, títulos que están siendo desarrollados por Arkane Studios y Tango Gameworks, developers que son propiedad de ZeniMax.
Microsoft respetará la exclusividad temporal de la que gozarán estos dos juegos en PlayStation 5, de manera que para que lleguen a Xbox Series X / S deberá agotarse el plazo pactado.
El segundo está relacionado con la posibilidad de que futuras entregas de IPs propiedad de ZeniMax lleguen a otras consolas, pues Spender adelantó que cada caso se analizará en lo individual.
‘Habrá lanzamientos en otras consolas, caso por caso’, respondió.
Nadella complementó diciendo que en Microsoft quieren que su contenido esté disponible de manera amplia.
¿Entonces las futuras entregas de DOOM, The Elder Scrolls, Fallout, Quake, Wolfenstein y otras franquicias de ZeniMax saldrán exclusivamente en Xbox o también estarán disponibles en otras consolas?
La respuesta más sencilla es: Microsoft decidirá cuáles de estos juegos llegarán a otras plataformas.
