Los videojuegos están en su momento económico más próspero, tanto así que el distanciamiento social los consolidó como una industria de crecimientos a pesar de las adversidades.
Hablando del distanciamiento, quedó claro que muchas personas acudieron a ellos para encontrar una manera de distraerse y entretenerse y, dentro de esa lógica, hubo varias que se dieron cuenta del potencial que tienen incluso para dedicarse a ellos y ganarse la vida.
Las personas que compiten en esports -una ramificación de videojuegos y deportes- son un claro ejemplo. Jugar profesionalmente en torneos de manera constante puede llevar a alguien a la cima de los deportes electrónicos, en el entendido de que nadie nace teniendo las habilidades necesarias.
Si te diste cuenta de que los videojuegos te llaman y de que quieres empezar a participar en torneos para descubrir tu verdadero potencial, te traemos una serie de recomendaciones:
1. Identifica cuál es tu perfil con potencial competitivo
Es importante que sepas hacia dónde te inclinas. En la arena competitiva hay espacio para juegos de pelea, battle royales, MOBAs, FPSs y más, y tu camino en los torneos de gaming desde luego debe arrancar en la arena que se te facilite más y en la que te sientas con mejor manejo de la situación.
2. Elige un juego para especializarte
Ya que hayas identificado tu perfil competitivo, lo mejor es que elijas un juego en específico para que no hagas otra cosa más que dominar todas sus mecánicas. Es un aspecto que debemos subrayar, pues, por ejemplo, podrías decir que te gustan los juegos de pelea y que eres bueno en ellos, cuando lo cierto es que cada título tiene mecánicas propias que lo distinguen del resto (jamás un Street Fighter se jugará como un Mortal Kombat o un King of Fighters, ya no digamos como un Guilty Gear o un Smash Bros.).
Los juegos en el ámbito competitivo son concretos. Si te gustan los battle royales, la opción está en títulos como Fortnite o PUBG; si te gustan los MOBAs entonces deberás analizar opciones como League of Legends o Dota 2; si lo tuyo son los shooter entonces tu llamado está en títulos como Counter-Strike: Global Offensive, Call of Duty u Overwatch; y así sucesivamente.
3. Hazte de equipo competitivo
Para ser hay que parecer. Y más allá de la apariencia, está tener un mejor desempeño. Alguien que quiere dedicarse al competitivo no puede usar periféricos como mouse, teclados y headsets comunes y corrientes, sino especializados.
Existen opciones en el mercado de distintas marcas y para presupuestos diferentes, de manera que te corresponderá analizar cuáles son las que se ajustan mejor a lo que pretendes.
Por ejemplo, la línea Beast de STF tiene el mouse Abysmal Arsenal, que cuenta con conexión USB, cuatro efectos de luz led, cuatro resoluciones de desplazamiento, un sensor Avago 3,050 y seis botones programables.
También tiene el teclado Abysmal Armor, que presume teclas mecánicas antighosting, luz led de siete efectos de visualización y conexión USB.
Y por lo que hace al audio, STF tiene headsets como el Muspell Ultimate con audio 7.1 de calidad Hi-Fi, micrófono, conexión USB, luz led y vibración para sentir lo que ocurre en pantalla; el Muspell Extreme con audio envolvente de 7.1 de calidad Hi-Fi, micrófono, conexión USB y luz led en las bocinas; y el Muspell Tournament con sonido Hi-Fi, luz led multicolor, micrófono y conexión 3.5 mm.
4. Cuida cuerpo y mente
No olvides que alguien que se dedica profesionalmente a los torneos de videojuegos y a los esports es por definición un atleta, alguien que requiere apoyos multidisciplinarios, desde entrenamiento hasta atención médica, y un seguimiento estricto a sí mismo y a su entorno.
Recuerda que nadie nace teniendo la habilidad para destacar en los torneos de gaming, así que puede que este sea tu momento de adentrarte en ellos y de ganarte la vida jugando.
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