Confieso que cuando me enteré de Flappy Bird decidí que no lo jugaría. Ya tengo suficiente con Candy Crush. No puedo perder más tiempo jugando adictivamente. Alguna vez hay que trabajar, pienso. Y sí, me quedé con la duda de por qué Flappy Bird resultaba tan adictivo. No lo sé realmente pero lo que sí logro entender es que este tipo de juegos llama tanto la atención que despierta la imaginación de mucha gente creativa y de ahí salen algunas ideas por demás ingeniosas.

Fawn Qiu, fundadora de MakeAnything, decidió hacer una versión física, real, de Flappy Bird. Armada con un Arduino, dos servomotores, unos interruptores y unos magnetos, consiguió desarrollar una simple versión del popular programa adictivo. Lo puso todo en una caja de cartón y decidió poner a propios y extraños a jugar un rato con su invento. No sabemos si tuvo mucho éxito en este sentido, pero está claro que hay que tener el suficiente ingenio y algo de conocimientos de electrónica digital básica y microcontroladores, para hacer este juego que vaya más allá de la pantalla virtual.

Fawn Qiu, como dijimos, es la fundadora de MakeAnything, un proyecto cuya idea es ayudar a promover la creatividad y los conceptos de ingeniería a través de kits en donde los niños puedan inteactuar. El sitio se lanzó en abril del 2012 y ya tiene cientos de usuarios. Qiu es la gerente de desarrollo de productos para una compañía que hace juguetes interactivos para niños. En el pasado trabajo en el MIT Media Lab en donde co-desarrolló Scratch para los profesores, el cual es un lenguaje de programación orientado al aprendizaje de los conceptos fundamentales del desarrollo de software.  Qiu tiene una maestría en educación por la Universidad de Harvard.

Referencias:

Blog de Fawn Qiu