Todos conocemos las increíbles ganancias que franquicias como las de Call of Duty obtienen en la industria. Sin embargo, éxitos como estos, también generan una especie de hoyo negro económico al resto del género al succionar las oportunidades que otros emprendedores en el mercado buscan para lograr que su producto sea publicado. Esto se conoce como efecto CoD y es o que causa el estancamiento de los FPS.

Steve Ellis, cofundador del equipo desarrollador del excéntrico gatillero TimeSplitters, declaró que el problema con los juegos de la fórmula ganadora (como Call of Duty) es que detienen la intención de los estudios de apostar a algo más innovador, pues no quieren correr riesgos contradiciendo las tendencias del mercado. Al preguntarle a Ellis sobre el desarrollo de TimeSplitters 4, el también responsable de la porción multijugador del clásico de Nintendo64, GoldenEye, confesó que, con excepción de Battlefield 3, el panorama para los FPS es muy incierto, ya que Call of Duty roba tanto la atención como las ganancias a todo aquél que desee innovar de alguna manera.

Crysis 2, el innovador FPS con las mejoras gráficas que la industria jamás ha visto fue un gran juego. Sin embargo, no lo hizo tan bien en el departamento económico, pues apenas pudo recuperar los costos de su desarrollo. ¿A qué se debe esto? A que toda idea que se aleje un poco del shooter militar semirrealista es automáticamente rechazada, tanto por los publicistas como por el grueso del público, inhibiendo el desarrollo de ideas frescas que revitalicen el género.

“Hemos estado en este negocio por más de un par de generaciones y las cosas parecen llegar a tal punto que este negocio no parece ser el mismo al que nos metimos al principio”, declaró Ellis.

Ellis también confesó que, por el momento, se retirará de la industria que en algún momento lo apasionó para concentrarse en proyectos más pequeños. “Hay mucha gente saliendo de las universidades que se muere por hacer eso (usar la fórmula de siempre), así que los dejaremos hacer hasta que se den cuenta de cómo es en realidad este negocio, Es ahí donde nosotros entraremos para hacer algo diferente de nuevo.”

Los FPSs necesitan un respiro hasta que alguien llegue con una idea que revolucione un género que, a no ser que se llame Call of Duty, está cayendo por su propio peso. Parece que el mismo hombre responsable del éxito de esta industria se arrepintió de entrar a una ambiente que antes favorecía las ideas y ahora sólo se dedica a administrar y perpetuar las ganancias. Después de todo, es un negocio.

Fuente: Edgeonline