Con el paso de las décadas, los videojuegos han pasado de ser un medio de entretenimiento y un estilo de vida, a convertirse en un deporte debidamente remunerado.
Tal como ocurre con los futbolistas, los basquetbolistas y los jugadores de la NFL -quienes cobran sueldos millonarios por sus habilidades en la cancha-, los videojugadores están recibiendo cantidades exorbitantes de dinero por lucirse con sus habilidades al control y competir en los esports (deportes electrónicos).
Aunque la discusión sobre la clasificación de los esports como deporte continúa, lo cierto es que ser gamer profesional deja más dinero que dedicarse a una carrera habitual como medicina, derecho, contaduría o comunicación.
Además, con un valor mundial superior a los 74 mil millones de dólares, definitivamente este es el mejor momento económico de los videojuegos y las grandes corporaciones saben que ahí es donde se debe invertir, pues es un mercado en constante evolución que garantiza la entrada de capital.
Al momento de elaborar esta nota, el gamer profesional que más dinero ha ganado en todo el mundo, de acuerdo con información de Esportsearnings.com, es el alemán Kuro Takhasomi, quien por sus habilidades en Dota 2 se ha llevado a la bolsa 4 millones 233 mil dólares.
Ese dinero resulta de la suma de distintas entradas: el salario fijo, los patrocinios, los premios y el streaming.
El salario fijo lo paga la liga o el equipo profesional. Por ejemplo, Ember, el equipo estadunidense de League of Legends, fue el primero que hizo públicos los sueldos de sus jugadores, con un rango de $1,000 a $5,000 dólares mensuales, dependiendo de sus habilidades, o de hasta $15,000 cuando se trata del mejor jugador.
Los patrocinios son una gran parte de la entrada de un jugador profesional, y pueden invertir marcas que en apariencia no tienen nada que ver entre sí, como Intel y Red Bull, pero que se benefician cuando sus productos se asocian a los top players. O hay casos colectivos, como cuando Audi patrocinó por 750 mil dólares al equipo Astralis de Counter Strike.
Los premios es donde están las sumas de dinero exorbitantes. Ganar una sola partida puede significar una entrada de 100 mil o 200 mil dólares, pero hay casos donde la bolsa de premios acumula decenas de millones de dólares, que al final de un torneo se reparten entre los equipos participantes.
Por streaming los jugadores también reciben dinero. Por ejemplo, alguien con dos mil suscriptores en Twitch puede llevarse hasta 5 mil dólares al mes, entre lo que monetiza y lo que donan sus viewers.
Si crees tener lo suficiente para sobresalir en los esports, debes saber que los juegos mejor pagados son Dota 2, Counter-Strike: Global Offensive y League of Legends.
Son los títulos que dominan los registros de los 100 jugadores profesionales mejor pagados del mundo. El dato ya lo tienes, ahora te toca pulir tus habilidades.