Durante la edición 2019 de los Game Awards cayó un bombazo que absolutamente nadie vio venir: la revelación oficial del Xbox Series X, la consola sucesora del Xbox One X y que hasta hace poco seguíamos conociendo como Project Scarlett.
Lo que más llamó la atención fue su diseño, pues es un prisma cuadrangular que se asemeja más a una PC gaming que una consola tradicional (Microsoft promete que Xbox Series X tendrá cuatro veces el poder del Xbox One X, algo que solo un diseño industrial podía albergar).
En menor medida generó conversación el control, pues los materiales de revelación estaban centrados en el diseño de la consola.
Fue a través de un comunicado publicado en la web de Microsoft que supimos que el nuevo Xbox Wireless Controller será compatible con Xbox One y Windows 10 y vendrá incluido con el Xbox Series X.
Pero para dar mayor luz en torno al control, Spencer compartió en entrevista con Gamespot varios detalles que dan cuenta de las posibilidades que habrá con este nuevo mando.
En primer término dijo que el control cuenta con un nuevo pad direccional híbrido cuya diferencia se notará al tenerlo en las manos. También ahondó en que ahora -en atención a las peticiones de los fans y a la manera en que los controles de Sony y Nintendo explotaron la característica- hay un botón de compartir. También habló del tamaño del mando, pues ahora se abarcará un porcentaje poblacional más alto.
«Hay varias cosas que aprendimos al escuchar a los fans y al hacer el control Elite. Una de ellas es relacionada con el pad direccional y por ello ahora contamos con un d-pad híbrido que creemos es importante […] Tenemos un botón de compartir. Escuchamos la retroalimentación. No somos los primeros en incluir un botón de compartir, así que no diremos que lo inventamos […] El nuevo diseño es ligeramente más pequeño que otros para incrementar la cobertura de un 95% a un 98%«, dijo.
Por último, en términos de compatibilidad, el control de Xbox Series X también funcionará con el Xbox One y PC.
