En el battle royale por la supremacía del género, Call Of Duty: Warzone llegó como pocos para quitarle el trono al antiguo rey: Fortnite.
Si bien el juego de Epic Games llevaba alrededor de dos años en la cima del mundo, desde el momento en el que Activision anunció una modalidad de battle royale para su franquicia Call Of Duty, solo era cuestión de tiempo para la caída de Fortnite.
Uno de los grandes atractivos de este, relativamente, nuevo género es que, la mayoría de los títulos sean free to play, pero, no crean por un segundo que las compañías de videojuegos están perdiendo un centavo; tan sólo en 2019, Epic Games declaró ganancias de 3 mil millones de dólares, gracias a la venta de elementos cosméticos en Fortnite.
En un juego con 150 personas compitiendo a la vez, las personalizaciones cosméticas, tal vez, cobran un poco más de valor de lo que una persona común podría creer.
Muchos gamers nos sentimos identificados y le dedicamos horas a la personalización de nuestro “operador”.
Por esto mismo, Activision anuncia que hará disponible en su pase de batalla de la temporada 6 del Call Of Duty: Warzone, al personaje: Farah, una heroína que forma parte de la historia en la campaña del Call Of Duty: Modern Warfare.
Farah proviene de un país inventado, pero que podríamos situar en una posición aproximada entre el mar negro y el mar aral, una zona de la que, hasta la fecha, es difícil obtener información y ciertas guerrillas podrían explotar en cualquier momento.
En el juego, el personaje de Farah siempre ha luchado por la liberación de su pueblo, y es una gran y veterana operadora respetada por el mismo Capitan Price.
El skin de Farah se desbloquea automáticamente en el nivel 0 del pase de batalla de la temporada 6 en su modalidad básica, pero tiene otros estilos que desbloquear.
La inclusión de personajes como Farah es muy importante para la comunidad gamer.
El hecho de jugar un juego como el Warzone, dada su popularidad, con un personaje que busca empoderar a la mujer, es algo que por lo menos para mí, es una elección casi automática.
Evidentemente, yo no soy una operadora peleando a muerte en una ciudad ficticia rusa, pero con este nuevo personaje, me parece que se abren las posibilidades de sentirse representada como mujer.