Últimamente se escucha por todos lados el término Web3, pero ¿qué es en realidad? ¿Tendré que contratar otro servicio de internet? ¿Bajar más apps? Aquí te lo explicamos.

En primer lugar, la Web3 no es tan accesible como podría parecer, de hecho algunas propiedades y servicios de Web3 requieren que comprendas todo lo que engloba, como la billetera de criptomonedas, dApps (aplicaciones descentralizadas) y los blockchain que la operan.

Al comienzo todo esto puede sonar complejo y aunque gran parte de esto lo es, no te preocupes, te tengo un glosario con una explicación (muy simplificada) para comprender de qué se trata todo esto.

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Glosario Web3

  • Wallet o monedero: tu monedero de criptomonedas donde almacenas diferentes tokens como Bitcoin, Ethereum y Matic.
  • dApps: aplicaciones descentralizadas que se ejecutan en protocolos basados ​​en blockchain.
  • Blockchain: Un protocolo descentralizado para proyectos Web3. Imagina que es como un libro de contador que realiza un seguimiento de todas las transacciones. Existen muchas tecnologías de cadena de blockchain diferentes.
  • Smart contracts o contratos inteligentes: fragmentos de programas en blockchain que se ejecutan cuando se cumplen los términos del acuerdo especificados en él. En la Web3, en lugar de un abogado, un programa verifica si se cumplen todas las condiciones del contrato.
  • IPFS: InterPlanetary File System o Sistema de Archivos Interplanetarios es una red de protocolo de almacenamiento punto a punto. Cuando intentas acceder a un archivo, IPFS entra a su contenido directamente, en lugar de a la ubicación.
  • Non-custodial wallet o Monedero sin custodia: el proveedor de servicios/navegador no almacena claves en su monedero, por lo que debes recordar tu frase secreta de 12 palabras para restaurar tu billetera en otro dispositivo.

Contexto e historia

De hecho, cuando estás viendo un sitio web en tu navegador, como Unocero.com, es el resultado de que el software maneja varias funciones, desde resolver la dirección del sitio hasta extraer contenido del servidor donde está alojado el sitio.

Por esta razón, la idea es que el navegador sea solo una ventana a Internet, eso significa que solo tiene que almacenar una cantidad mínima de datos y realizar un procesamiento mínimo en tu computadora para acceder a sitios web.

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Sin embargo, un navegador Web3 va más allá de eso, es solo una cáscara hueca, y todas las demás herramientas necesarias para su experiencia se extraen de una red descentralizada.

La idea de una verdadera dApp es que ejecute el código en tu PC y extraiga datos de almacenamiento descentralizado con una referencia hash como IPFS. 

Es decir, la dAPP descarga el código fuente de un sitio confiable y ejecuta programas localmente, de esta forma el backend está hecho de contratos inteligentes.

¿Puedo acceder a la Web3 hoy?

Foto: Shubham Dhage on Unsplash

Siguiendo con si podemos acceder a sitios Web3 hoy en día, la respuesta es sí, pero es posible que tengas que hacer un poco de trabajo previo para acceder a ellas.

Por ejemplo, si estás utilizando Chrome, deberás instalar una extensión de wallet como Metamask para conectarse a dApps y modificar tu configuración de DNS para acceder a algunos dominios Web3.

Así mismo, hay algunos navegadores como Opera y Brave que ofrecen una experiencia Web3 algo nativa con billeteras integradas y compatibilidad con nombres de dominio basados ​​en Web3

Foto: TheNexrWeb

Además, ambos tienen esta experiencia disponible en dispositivos móviles y de escritorio, e Incluso intentan simplificar el proceso de incorporación a la Web3.

No obstante, es posible que no desees utilizar esta versión como navegador principal. Pero es un buen punto de partida para familiarizarse con todas las cosas descentralizadas.

Con todo esto, los navegadores principales, como Opera y Brave, exponen a los usuarios al riesgo de descargar la extensión incorrecta que puede contener malware, además son procesos adicionales que consumen poder de procesamiento.

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Desafíos de la Web3

Uno de los mayores desafíos al acceder a las propiedades de Web3 es que debes saber qué tokens está utilizando y en qué protocolo de blockchain se ejecuta la aplicación en particular.

Por ejemplo, si usas Chrome, MetaMask funciona para todos los blockchains y aplicaciones basadas en Ethereum. Pero para usar aplicaciones compatibles con Solana, debes usar billeteras Phantom.

A pesar de que los desarrolladores de los navegadores están tratando de cerrar esta brecha integrando lentamente más estándares para que no tengas que preocuparte por lo que hay en el back-end.

En qué terminará todo

Del mismo modo, existen dos grandes obstáculos de la experiencia Web3. El primero es recordar la frase de 12 palabras (que si olvidas, pierdes el acceso a tu wallet)  y comprender el razonamiento de seguridad detrás de este método de autenticación.

Por su parte, el segundo obstáculo es necesitar Ether para hacer cualquier cosa, lo cual no es barato.

Actualmente, acceder a las propiedades de Web3 es complicado y el usuario promedio tiene que lidiar con una curva de aprendizaje empinada.

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Luego hay preguntas como: «¿Qué token debo usar aquí?», «¿En qué cadena de bloques funciona esta aplicación?» y «¿Funcionan entre sí?» 

Imagina tener que activar 20 perillas y configuraciones solo para enviar un tweet, así es como se puede sentir Web3 en este momento.

Finalmente parece que el futuro de los navegadores va en esa dirección y muy pronto no tendremos que preocuparnos por el protocolo de back-end, en donde habrá nombres de usuario más fáciles de recordar, en donde Web3 es solo… la web.

Fuente: TheNextWeb