Aunque muchas películas de los 80 auguraban que para el año 2000 tendríamos autos que vuelan y aunque llevamos 21 años del nuevo siglo y esto no ha pasado, podemos decir que el camino está marcado con la gran oferta de eléctricos e híbridos al momento.
Pero estos automóviles no son nada nuevo
Aunque pareciera que este tipo de autos son un concepto nuevo, la historia de los eléctricos e híbridos data de 1900, cuando Ferdinand Porsche presentó un automóvil con un motor de gasolina que alimentaba un dínamo, el cuál cargaba una batería eléctrica que funcionaba para arrancar el motor.
Por parte de los eléctricos, se puede mencionar que en 1800 ya se estaba experimentando con motores de baterías de plomo que no ayudaban ni al auto en sí ni a la naturaleza.
Si llevan tantos años, ¿por qué han fracasado?
Si bien el desarrollo de ambas tecnologías data de hace casi 200 años, sus fracasos se deben al tipo de materiales implementados, el plomo como principal recurso para las baterías, reduciendo su velocidad y efectividad a la hora de su uso. Sin embargo, gracias al paso del tiempo y a la perseverancia de muchas marcas e ingenieros, se ha podido mejorar este tipo de automóviles en cuanto a autonomía, velocidad e incluso hacerlos cada vez más «futuristas».
Y ¿cuál es la diferencia?
Los híbridos son autos que incorporan dos motores: uno de combustión interna y otro meramente eléctrico. El automóvil puede funcionar implementando ambos motores para no perder potencia o sólo el eléctrico, para hacerlo más amigable con el ambiente. Cabe mencionar que gracias a esta tecnología su autonomía es igual a la de un auto de gasolina. Ejemplos de estos autos son el BMW en toda su gama de PHEV, el Prius de Toyota, la X-Trail Hybrid de Nissan, entre muchos otros.
Los autos eléctricos implementan 100% el uso de energía eléctrica para su funcionamiento. Estos envían la energía eléctrica a través de un cargador, que la almacena en una batería y la envía a un convertidor para poderla llevar al motor eléctrico y hacer que el automóvil funcione. Los ejemplos de estos autos van desde los compactos como el ID.3 de Volkswagen, el Bolt EV de Chevrolet o el Mini Eléctrico hasta las camionetas como el iX de BMW y la EQC de Mercedes Benz por mencionar algunos autos que están y estarán disponibles en México.
¿Cuál es mejor, híbrido o eléctrico?
Esta pregunta es muy amplia ya que las necesidades de cada consumidor son distintas. A esto tenemos que sumarle el hecho de la autonomía de los vehículos, el presupuesto de cada persona y hasta las tecnologías internas que cada uno de estos autos contienen. Lo que es cierto, es que los híbridos pueden ser un puente de transición entre los vehículos de combustión interna y los 100% eléctricos. Afortunadamente para ambos modelos, cada vez más marcas se suman a instalar cargadores por todo el país para que las personas interesadas en la electromovilidad se sumen cada vez más y se sientan «protegidas» en cuanto a la carga de sus vehículos.
¿Qué te parecen estos autos? ¿Estás listo para unirte a la electromovilidad? Compártenos tu punto de vista en los comentarios de nuestras redes.