En un mundo donde el home office y la modalidad híbrida se han convertido en la norma, la forma en que trabajamos ha experimentado un cambio significativo. Ya no estamos atados a una oficina en todo momento, y trabajar desde casa es una opción válida para muchos. Sin embargo, a veces necesitamos un cambio, lo que nos lleva a trabajar desde cafés, y en ocasiones, lugares inusuales como barcos o centros comerciales. Para estas situaciones, te damos 5 consejos para utilizar un Wi-Fi público de forma segura. 

Ofrecer Wi-Fi público permite a las personas acceder a Internet, lo que es útil para los clientes y puede fomentar que pasen más tiempo en lugares públicos. Sin embargo, a pesar de su utilidad, las redes Wi-Fi públicas son abiertas para cualquiera que desee usarlas, y la seguridad de los datos transferidos no es tan sólida como en tu red doméstica o corporativa.  

Tus nombres de usuario, contraseñas, detalles bancarios y otra información personal podrían estar en riesgo si no tienes cuidado. Esto puede deberse a la propia inseguridad de la red o a que un hacker malicioso se haya infiltrado en la misma y dirija los datos de otros usuarios a canales que pueden interceptar. 

A continuación, te presentamos cinco pasos para ayudarte a mantener tus datos seguros mientras utilizas redes Wi-Fi públicas. 

Verifica que la red sea legítima 

Imagina que te encuentras en un aeropuerto y ves una red Wi-Fi disponible con el nombre ‘Wi-Fi del Aeropuerto Gratis’ – parece legítima, ¿verdad? Un aeropuerto es un lugar donde las personas a menudo necesitan esperar, por lo que tiene sentido que quieran conectarse a Internet, evitando así el uso de sus propios datos.  

Pero, ¿cómo puedes estar seguro de que esa red realmente es proporcionada por el aeropuerto? Existe la posibilidad de que sea una red creada por un estafador que espera atrapar a personas desprevenidas.  

Después de todo, cientos de miles de personas pueden pasar por un aeropuerto en un solo día, y si una fracción de ellas se conectara a una red Wi-Fi falsa, un estafador podría robar una gran cantidad de datos. 

Para hacer frente a esta amenaza, verifica la legitimidad de la red Wi-Fi. Esto a veces puede ser complicado si te encuentras con una larga lista de redes Wi-Fi disponibles. Sin embargo, la mayoría de los aeropuertos muestran el nombre de su red Wi-Fi oficial en letreros. Presta atención a esta información antes de hacer clic para unirte a la red. 

Evita ingresar o acceder a información sensible 

Muchas redes Wi-Fi públicas requieren información tuya para registrarte y usar sus servicios. Esto podría incluir tu dirección de correo electrónico o incluso tu número de teléfono.  

Si no deseas correr el riesgo de que la empresa que proporciona la Wi-Fi almacene tus datos o los use con fines de marketing, considera la posibilidad de utilizar una dirección de correo electrónico secundaria. 

Algunas redes también pueden requerir que configures una contraseña para usar la Wi-Fi. Si este es el caso, no uses la misma contraseña que empleas para otras cuentas, especialmente si dicha contraseña está vinculada a tu dirección de correo electrónico.  

Adoptar este enfoque garantiza que, en caso de que se filtre la contraseña, no pueda utilizarse para acceder a otras cuentas vinculadas a tu dirección de correo electrónico. 

También debes ser cauteloso sobre la información que compartes a través de redes Wi-Fi públicas. Evita realizar acciones que involucren datos sensibles, como nombres de usuario, contraseñas y detalles bancarios. 

Olvida la red una vez que dejes de usarla 

Si te desplazas con frecuencia, es probable que te conectes a las mismas redes en diferentes ocasiones. Por ejemplo, al viajar, podrías conectarte a la misma red en ambos extremos del vuelo o visitar una cadena de tiendas de café que tenga ubicaciones en diversos lugares. 

Si previamente te conectaste a una red o proveedor de servicios, es posible que tu dispositivo intente reconectarse automáticamente a ellos. Es fácil pasar por alto este detalle y asumir que la red es segura, pero las cosas pueden cambiar entre visitas. 

Para garantizar tu seguridad, configura tu dispositivo para que olvide las redes que hayas utilizado previamente o, al menos, para que no intente reconectarse automáticamente. Si decides volver a conectarte a la red, deberás hacerlo manualmente y solo si estás seguro de que es segura. 

Utiliza una VPN  

A veces, no puedes evitar utilizar Wi-Fi en una red pública. Pero incluso si tienes la certeza de que la red es legítima y segura, puedes tomar medidas adicionales para mantener tus datos a salvo. Una de esas medidas es utilizar una VPN (Red Privada Virtual). 

Las VPN proporcionan dos servicios clave para mantener tu información privada y segura. En primer lugar, cifran tus datos. Esto es útil en redes Wi-Fi públicas, ya que estas suelen ser mayormente no seguras.  

Al usar una VPN, dificultas que el operador de la red o cualquier persona que intente utilizar la red con malas intenciones vea la información que envías y recibes. 

En segundo lugar, las VPN también pueden ocultar tu dirección IP, manteniendo en secreto tu ubicación geográfica. Esto es importante para aquellos que desean preservar su privacidad en línea. 

Si viajas con frecuencia o necesitas conectarte a Wi-Fi en espacios públicos con regularidad, una VPN es una herramienta útil para mantenerte seguro en línea. Existen muchos proveedores de VPN diferentes, y sus VPN son fáciles de instalar. Cuando quieras utilizar la VPN, simplemente inicia sesión y ejecútala como cualquier otra aplicación. 

Es posible que te sientas tentado a optar por un servicio de gratuito. Sin embargo, aunque las VPN se supone que protegen tu privacidad, algunos servicios gratuitos solicitan permisos innecesarios o incluso no ocultan completamente tus datos.  

Si bien, en general, los servicios de VPN por suscripción son más confiables que las versiones gratuitas, algunos proveedores de VPN de renombre ofrecen opciones gratuitas limitadas. 

Usa el hotspot de tu teléfono en su lugar 

Aunque tomes precauciones, conectarte a una red Wi-Fi pública conlleva ciertos riesgos. Sin embargo, existe una alternativa: utilizar los datos móviles de tu smartphone. 

Conectar a Internet a través de los datos móviles de tu smartphone es más seguro que utilizar una red Wi-Fi pública. Además, si deseas conectar tu laptop a Internet, puedes convertir tu smartphone en un punto de acceso Wi-Fi y compartir la conexión.  

Esta opción está ganando popularidad a medida que los teléfonos 5G se vuelven más comunes, proporcionando a los usuarios velocidades mucho más rápidas que las redes Wi-Fi públicas sobrecargadas. 

Si eliges utilizar un punto de acceso, asegúrate de que la conexión esté protegida con una contraseña compleja para evitar que otros accedan a ella. 

También debes considerar si realmente necesitas conectarte en absoluto. Quizás no todas tus visitas a una cafetería o un aeropuerto deben ser una carrera para volver a estar en línea.  

Tal vez tomar un café o leer un libro sea una mejor manera de pasar unos minutos en lugar de apresurarte a revisar tus correos electrónicos en una conexión Wi-Fi aleatoria. 

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