Niñas y niños tienen mucho que contar en un mundo que comienza a recuperarse de la pandemia. Sus vidas cambiaron durante el último año: dejaron de ir a la escuela y conocieron nuevas formas de aprender desde casa. Algunos aprendieron a comunicarse con sus seres queridos a través de la tecnología, mientras que otros continúan sin acceso a ella.
Para que niñas y niños puedan aprender nuevas maneras de contar historias, Disney desarrolló una herramienta de fácil acceso llamada Historias para Armar. Se trata de una iniciativa multiplataforma de experiencias de aprendizaje para niños y niñas de ocho a 11 años enfocada en el storytelling, a través de la que pueden desarrollar habilidades socioemocionales y de lectoescritura.
“Historias para Armar combina también la cultura maker con los medios digitales y se enfoca en las ideas y la creatividad, en cómo contar una historia y expandirla en distintos formatos”, explica a Unocero Belén Urbaneja, directora de Responsabilidad Social Corporativa, Gestión de Marca y Diversidad e Inclusión en The Walt Disney Company para Latinoamérica. “Tiene mucho del know how de Disney porque es lo que nosotros sabemos hacer, contar historias”.
De esa manera, Historias para Armar es más que una fuente de entretenimiento: también es un medio para que niñas y niños desarrollen habilidades que han quedado rezagadas ante la pandemia y las restricciones que esta trajo consigo en los espacios educativos. “Entendimos que teníamos una responsabilidad y podíamos ofrecer algo que no solo les diera una herramienta a niños y niñas, sino también a educadores, padres y madres”.
Historias para Armar es una herramienta de alfabetización con todo lo que eso implica en el siglo XXI. Tradicionalmente, la alfabetización ha abordado dos aspectos que son leer y escribir; sin embargo, ahora esto también implica conocer las habilidades tecnológicas que necesitarán para la vida. En este sentido, hay dos perfiles que las mentes detrás de esta plataforma de Disney quieren alcanzar: niñas y niños que tienen poco acceso a la tecnología y, por otro lado, los que viven su vida cotidiana inmersos en ella.
“En esta paradoja de la sociedad hiperconectada, en la que hay niños que no acceden y niños que acceden de más, Historias para Armar intenta dar respuestas”, dice Mariela Reiman, miembro del Comité Ejecutivo de Chicos.net. Reiman nos explica que uno de los principales desafíos durante el desarrollo de Historias para Armar fue el de hacerlo accesible para todas y todos:
“Todos los contenidos fueron pensados para poder usarse online y offline, y eso es un atributo muy necesario y valorado en las escuelas de Latinoamérica, además de ser gratuito. También fue desarrollado con una mirada y un principio de low tech: a prueba de equipos precarios, con bajos requerimientos. Este fue un desafío importantísimo porque si entraste a la plataforma verás que la calidad gráfica es muy alta, así que debió haber un equilibrio entre muy buena calidad, videos, colores, gráficos, pero que no sea pesado para que todos puedan instalarlo en sus computadoras, aun en aquellas más básicas”.
“Darle una voz a la infancia es muy importante”, finaliza Belén Urbaneja. “Que se sientan protagonistas de sus propias historias, y eso solo se puede conseguir si ellos también viven el proceso de escribirlas”.
Si tú o las niñas y niños de tu vida quieren conocer y usar Historias para Armar, pueden empezar desde el sitio historiasparaarmar.org