Todos los días utilizamos nuestro smartphone para enviar mensajes, hablar por teléfono y, más allá de las actividades básicas, navegamos en Internet, visitamos Facebook, compartimos ubicación, en fin muchas cosas, pero ¿en algún momento te ha pasado por la mente que tu dispositivo podría detectar cuando estás en depresión?
Un estudio realizado por investigadores de la Universidad Northwestern ha descubierto que el uso de los sensores GPS pueden determinar si un usuario está mostrando signos de depresión.
En el estudio participaron 40 usuarios, quienes en sus teléfonos móviles tenían una aplicación llamada Púrpura del Robot, la cual permitía detectar la creación de intervenciones y experiencias de comportamiento sensibles.
En el informe del estudio explican que los investigadores pudieron utilizar los datos de los teléfonos y que gracias a ellos pudieron identificar a participantes con indicios de depresión con 86.5% de exactitud.
Sin embargo, no sólo utilizaron su smartphone, sino que antes de comenzar el estudio le pidieron a los participantes completar una evaluación en línea, la cual consistía en un cuestionario de datos demográficos e historial médico del paciente.
Estos métodos son utilizados normalmente para crear un “pre reporte” y así tener una idea más clara sobre en qué grado de depresión se encuentra el usuario.
¿Cómo utilizaron el GPS?
El GPS sirvió para identificar con qué frecuencia los usuarios estaban en sus teléfonos, cuándo iban a casa y en qué momentos desviaban su ruta diaria. Los investigadores encontraron que las personas con síntomas depresivos tienden a moverse menos por el espacio geográfico.
La depresión, más que un sentimiento, es considerada como una enfermedad y en casos más avanzados es muy peligrosa, es por eso que el profesor David. C. Mohr dijo que este nuevo método podría servir para atender al paciente de forma discreta, detectando factores en el comportamiento que están relacionados con la depresión.
Sin embargo, uno de los temas que más se están discutiendo en torno al estudio es sobre la privacidad del usuario, ya que prácticamente saben todo de las personas, sobre todo cuando los datos del GPS y Log-in se clasifican como metadatos.
Sin duda todavía falta pulir el método, pero podría ser una buena forma ya que actualmente los dispositivos móviles son parte de nosotros y la forma en la que actuamos en la vida real y la digital pueden ser muy distintas.
Fuente: Techcrunch
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