Cuando salió la primera tableta de Apple, el iPad, el mundo sin duda cambió y la tecnología decidió cambiar de paradigma, abandonando un poco las laptops y netbooks, para enfocarse en las tablets, en estos dispositivos cuya idea principal era la portabilidad y la rapidez para poderse usar. Apple le puso a la tableta el iOS, que es finalmente el sistema operativo que usa el iPhone y aparentemente todo ha marchado bastante bien.
Android, por su parte, se puso de moda y muchísimas tablets, de todos los fabricantes posibles, empezaron a sacar sus modelos con el sistema operativo de Google porque éste es de código abierto. Así, de pronto, no sólo hubo teléfonos con Android, sino un número grande tabletas con Android, unas mejores que otras, desde luego.
¿Pero es este en final de la historia? ¿No hay otro sistema operativo que pueda entrar en este mercado? Aparentemente WebOS lo está intentando pero no está claro si podrá verdaderamente competir. El Windows Phone se quedó rezagado y prácticamente ha muerto aunque se espera aún que salga algo que sea como Surface Phone, pero hasta ahora no hay noticias que así lo consignen. Por ello, el mercado de los sistemas operativos móviles pareciera que es sólo de Apple o Google.
Sin embargo, la propia empresa Google tiene un as bajo la manga en este sentido y es el Chrome OS, el cual es, de acuerdo a la Wikipedia: “es es un proyecto que se basa en el kérnel de Linux y utiliza el navegador web Google Chrome como su principal interfaz de usuario, es un sistema operativo basado en la nube. Por lo tanto, Chrome OS soporta principalmente aplicaciones web.
Aparentemente Chrome OS no tuvo mucha repercusión cuando salió, pero da la impresión de que ha capturado el mercado educativo hasta el grado que ya incluso Apple ha decidido sacar un iPad “de bajo costo” para así entrar a este mercado que por alguna razón la empresa de la manzana dejó de trabajar hace muchos años.
Hay que decir que el iPad sigue manteniendo el liderazgo entre las tabletas. Las que usan Android no parecen poder competir con el producto de la manzana realmente por muchos motivos. Pero quizás incluso Google tenga algo de culpa en esto porque desde el 2015 no han construido ninguna tableta con Android, sino que se han ido a buscar fabricantes de tabletas con Chrome OS.
Acer ha sacado ahora su primera tableta con Chrome OS y en el correspondiente blog se dice: “Desde su debut, las escuelas han usado las Chromebooks porque son rápidas, fáciles de manejar, compartibles, seguras y a un precio accesible. Hemos escuchado con cuidado y hemos tenido retroalimentación de todo el mundo y el tema en común es que la mayoría quiere los beneficios de las Chromebooks en las tabletas”.
La nueva tableta de Acer parece será el primer modelo de muchos: “Empezando hoy, con la nueva Acer Chromebook Tab 10, estamos justamente haciendo eso, es decir, tener la primera tableta hecha para la educación que corre Chrome OS, lo que le da a las escuelas una administración sencilla de estos nuevos equipos”. ¿Y dónde queda Android? Quizás empiece efectivamente ahora a especializarse en telefonía nada más.
Es un hecho conocido que tanto Android como Chrome OS se basan en Linux. Chrome OS tiene el navegador Chrome como su fuese su interfaz de usuario y su “shell” para comunicarse en modo consola en caso necesario. Android por su parte tiene el Android Launcher y su shell. Desde el punto de vista del programador, parecen entornos totalmente diferentes. Por ejemplo, si se quiere crear una app para Chrome OS, entonces lo que realmente se hace es crear una Web app usando HTML/CSS para la interfaz gráfica y Javascript para el código. En cambio, si se quiere crear una app para Android, se usa el marco de trabajo de Android y código en java o Kotlin, entre tantos lenguajes que pueden usarse para programar en este sistema operativo. Los programas corren en la JVM (Java Virtual Machine) y no en código nativo.
Es interesante saber que Google ya dejó de dar soporte a las apps de Chrome en las máquinas de escritorio. Esto deja a estas apps aisladas de otros entornos y solamente funcionan en Chromebooks. Una mejor alternativa para usar las apps de Chrome podría ser el escribir una app web y confiar en que corra en las Chromebooks. Pero además, las apps de Android pueden correr en las Chromebooks. Esto podría considerar a Android como un contenedor del sistema operativo Chrome. El truco, curiosamente, es correr el sistema operativo Android bajo Chrome OS. Y aunque parezca una locura es así como funciona.
Por otra parte, no todas as Chromebooks son capaces de correr las últimas apps del mundo Android. El equipo en Google está trabajando para correr todas las apps de Android en la Chromebook, pero resulta evidente que no todas las app podrán actualizarse.
Así pues, Android corre las apps de Android y Chrome OS puede correr las apps de Android. Y en esos términos las tabletas con Chrome OS pueden significar una interesante maniobra ara tener muchas apps que ya corren en el mundo Android y que podrían portarse casi automáticamente a Chrome OS. Esto tiene sentido pues así de la nada Chrome OS tendría miles y miles de apps listas para ser ejecutadas en su entorno.
Vamos a ver cómo se desarrolla esta tecnología, pero es claro que las empresas de este nicho de mercado quieren tener un nuevo pastel de ganancias y por ello hacen estas apuestas tecnológicas que resultan muy interesantes.