A muchos seguidores de Nokia seguramente les ha pasado por la mente la pregunta “¿Por qué no eligió Nokia a Android?”. En una conversación, Stephen Elop, director ejecutivo del a compañía finlandesa, explica cómo es que se decidió utilizar el sistema operativo de Microsoft en vez del de Google.
En primer lugar, se debe recordar que en su momento hubo reportes que indicaron que Nokia sí consideró ir con Android hacia un nuevo camino, pero al final, Elop tomó la ruta de Windows Phone para crear una nueva gama de dispositivos.
También, no hay que olvidar que Stephen procedía de un puesto en Microsoft, lo que da ciertas luces en cuanto a su posible predilección por el software de esta compañía, aunque nada se ha confirmado al respecto.
Por otro lado, en una mesa redonda donde participó el diario británico The Guardian se obtuvieron nuevas declaraciones de Elop en torno a la decisión de usar Windows Phone.
En primer lugar, Elop afirma que su compañía ya veía venir el que una sola empresa fuera la dominante en el entorno de Android, y como Nokia ya estaba retrasado para ingresar a ese mismo mercado, prefirió hacer lo más sensato y tomar a Windows Phone para convertirse en “la tercera opción” que se ofrecería a los ya existentes Android y iPhone.
“Estoy muy contento con la decisión que hicimos, de lo que estábamos preocupados hace un par de años era del riesgo tan alto de que un fabricante de hardware se volviera el dominante en Android. Teníamos la sospecha de quién sería por los recursos que estaban disponibles, la integración vertical, y permanecimos respetuosos al hecho de que era tarde para tomar la decisión [de usar Android]. Muchos otros ya estaban en ese espacio”, dijo Elop.
Según Stephen, algo de lo más importante para los operadores telefónicos (especialmente en EUA) es que la oferta de dispositivos no sea de un solo modelo, así que, teniendo a Android con Samsung (que es el rival más fuerte en ese ecosistema) y al iPhone de Apple, Nokia sería la tercera alternativa, factor por el que se logró tener una alianza más fuerte con AT&T en los Estados Unidos.
Así que, para quienes aún se cuestionaban sobre la decisión de Nokia, la realidad es que la empresa prefirió apostar por la elección que parecía ser más adecuada en términos de negocios que la que satisfaría a más usuarios que pedían a gritos un teléfono Nokia con Android.
De cualquier forma, Nokia parece haber tomado el lugar como el rival más fuerte en su propio entorno, aun cuando a Windows Phone le quede un amplio camino por recorrer para situarse a la altura de ventas que tiene Android o iPhone.
Referencia: The Guardian