Con el lanzamiento del iPhone X, Apple realizó cambios importantes a su dispositivo estrella después de 10 años de su lanzamiento en el 2007, y sin duda dos de sus características más sobresalientes del nuevo smartphone de Apple es la pantalla sin bordes y el Face ID, uno de los sistemas de detección de rostro más avanzados que hemos visto en un smartphone.
Y para que esta razón suficiente para que Apple no haga grandes cambios en los iPhone del siguiente año, pues según el analista Ming-Chi Kuo de KGI Securities menciona que las mejoras en Face ID y batería llegarán hasta el 2019, que es justamente cuando Apple comenzará a tener un catálogo de aplicaciones y funciones mucho más enfocadas en realidad aumentada, lo que requerirá un consumo energético mayor.
El analista mencionó lo siguiente:
Creemos que la adopción de la cámara TrueDepth para la detección 3D en 2017-18 creará una demanda de baterías de mayor capacidad. A partir de 2019, pronosticamos que el iPhone puede adoptar funciones mejoradas de detección 3D y funciones de realidad aumentada, y consumirá más energía, aumentando aún más la demanda de baterías de gran capacidad.
Según algunos rumores y filtraciones de Benjamin Geskin, los iPhone que llegarán en el 2018 serán prácticamente iguales que el actual iPhone X, pero es probable que haya tres modelos distintos en el mercado, concretamente de 5.8, 6.1 y 6.5 pulgadas.
Obviamente llegarán con mejoras en el procesador (chip A12), mejor optimización de batería, mejoras en la carga inalámbrica y los dos modelos más chicos podrían incluir pantallas LCD, dejando sólo un modelo con pantalla OLED como el actual iPhone X.
Así que si estás esperando grandes cambios en los iPhone del siguiente año, tal vez sea mejor que esperes hasta el 2019 para comprar uno de los teléfonos de Apple.