Internet puede ser una bendición o una maldición. Así como nos puede proveer de información muy valiosa, de la misma manera puede hacernos creer cualquier cantidad de estupideces, que sí, muchas de ellas no soportan el más simple análisis, pero que se corren como reguero de pólvora, sobre todo en las redes sociales y entonces la gente, al ver lo mismo una y otra vez, termina creyendo cosas que son evidentemente falsas.
Una de ellas es el que se presenta en muchos videos en donde el protagonista del mismo le quita la batería a su dispositivo Samsung. Entonces le quita a la batería la calcomanía que la recubre. Al quitarla puede verse que hay una especie de circuito electrónico y esto, dicen, es un micrófono espía, con el que el fabricante, quizás con el apoyo del servicio secreto norteamericano, pueden grabar todas las conversaciones que el dueño del teléfono tenga.
Un asunto que parece mostrar que la razón de ese circuito no es necesario (y por ende es un micrófono, o un chip espía), es que si se le quita y se vuelve a colocar la batería en el teléfono, éste enciende y funciona perfectamente. Así, suponen los que en todo ven una conspiración, que la calcomania cubre un malévolo invento para espiarnos.
Pero la realidad es que este supuesto chip no es un micrófono, sino un dispositivo NFC, es decir un dispositivo Near Field Connection, que se usa para comunicar (en los países desarrollados) el teléfono Android con un dispositivo comercial (como una terminal para pagar algo), y que se cargue de inmediato la transacción.
Así pues, si usted le quita la calcomanía a la batería de su teléfono no pasará nada, sobre todo en los países como el nuestro, que no ha incorporado esta tecnología NFC, pero si está en los Estados Unidos o Canadá, por ejemplo, lo único que habrá logrado al quitar la calcomanía, es deshabilitar esta función de su teléfono… hasta que decida poner otra batería al teléfono.
Así pues, a no creer en tanta babosada que nos presentan como si fuese real. Hay que informarse. Suena ridículo que un país decida andar grabando las conversaciones de alguien así. Hay otros métodos mucho más difíciles de detectar en todo caso. Eso de jugar al espía vs espía por una simple calcomanía es de pena ajena. De verdad.
Referencias: