Hoy será oficialmente el día en que el presidente electo Donald Trump haga la toma de posesión de la presidencia de los Estados Unidos, pero para este importante suceso el servicio secreto de nuestro país vecino obligó al magnate a renunciar a su “querido” dispositivo Android.
Según The Associated Press y The New York Times, Trump está obligado a utilizar un teléfono ultraseguro, cifrado y aprobado por el servicio secreto de los Estados Unidos. De hecho también ha tenido que renunciar a su tradicional número telefónico y cuenta de correo por otros que solo conocen un limitado y controlado número de personas.
Lo que aún no está claro es el tipo de dispositivo que utilizará el próximo presidente de los Estados Unidos. Normalmente las agencias de seguridad norteamericanas han usado teléfonos BlackBerry modificados para sus anteriores presidentes, y aunque varios de ellos como Obama han peleado e insistido en mantener sus teléfonos del día a día, la seguridad nacional y del presidente es algo que el servicio secreto no se toma a juego; de ahí que no permitan ningún otro dispositivo no autorizado por los altos mandos de seguridad.
Trump ha insistido que se siente “aislado” sin su teléfono Android desde el cual tuitea constantemente, pero además lo ha utilizado durante toda su campaña para atender llamadas de políticos, periodistas y líderes mundiales. Incluso ha dicho a su favor que gracias a ello ha obtenido el número de personas importantes en todo el mundo, por lo que para él no es práctico utilizar un nuevo dispositivo.
Aprovechándose de la situación, el popular museo de noticias y periodismo, Newseum, ha contactado al presidente electo para que done su dispositivo Android a las instalaciones del museo y pueda ser mostrado al público en una colección en su honor, aunque hasta ahora Donald Trump no ha dado autorización para ello, seguramente su enorme ego no le permitirá desaprovechar esta oportunidad.
Referencia: Associated Press, The Verge