La batería de los celulares, es algo que las personas cuidan demasiado, porque creen que es el corazón de los dispositivos, así que si algo malo le sucede, pueden tenerse consecuencias fatales que involucran que el teléfono se vuelva inservible o que acabe muriendo.
Esta es una creencia que se ha vuelto tan común a pesar de ser falsa, porque primeramente la batería no es el corazón del teléfono, sí es parte fundamental de él, pero no al grado de considerársele de esta manera.
De igual manera, es importante cuidar de la batería de los smartphones, pero no al grado de obsesionarse con ella, porque realmente sabiendo un par de características de ella (la batería), es que se puede estar tranquilamente usándola.
Estas características, le permitirán al usuario saber cómo han evolucionado las baterías y qué tipo de pila tiene; por lo tanto se enlistarán los tipos de baterías que hay o había en los celulares.
Baterías de Niquel-Cadmio (NiCd)
Este tipo de baterías son consideradas las primeras que se utilizaron cuando comenzaron a desarrollarse los dispositivos móviles, por lo que es comprensible que su vida útil fuera tan corta, ya que no se tenía el suficiente conocimiento para crear una que durara más tiempo.
Por esta razón, es que su vida se limitaba a 1,500 ciclos de carga, lo que además de hacerla ineficaz, la hacía peligrosa, puesto que contaba con elementos contaminantes (Cadmio) que dañaban al medio ambiente. Esta también fue una de las principales razones del por qué se sacó del mercado, tanto doméstico como industrial.
De igual manera, la NiCid tenía el “efecto memoria”, un problema común que involucra los químicos con los que se realizan las baterías y que provoca que una vez cargada la batería (100%), se descargue a los pocos minutos de uso.
Este efecto sucede porque los elementos químicos, que generan la corriente, se comienzan a cristalizar dentro de la pila, provocando que se deteriore de la capacidad de carga y por supuesto, la vida de las baterías.
Sin embargo, se les tomó como base para crear nuevas y mejoradas pilas que fueran mucho más duraderas, útiles, menos contaminantes y poco propensas al “efecto memoria”.
Baterías de Niquel-Metal Hidruro (NiMH)
Con el fin de mejorar las baterías y tras observar los efectos negativos que las baterías de Cadmio provocaban en el ambiente, se sustituyó este elemento por el Metal Hidruro, para que fuera menos tóxico y más útil, porque al ser remplazado, se tuvo un mejor rendimiento que prolongaba el tiempo de duración aumentando un 30% comparadas con las NiCid.
Pero las mejoras eran pocas, porque realmente los ciclos de carga seguían siendo insuficientes para las constantes actividades que realizaban las personas en sus celulares, por lo tanto, se optó por cambiarlas e incluir otro componente, que tuviera el mismo cuidado hacia el ambiente, sólo que con más ciclos.
Baterías de iones de Litio
Este tipo de batería es el más utilizado en la actualidad, no sólo en los teléfonos, sino también en las laptops, cámaras y consolas portátiles, porque el Litio resulta ser una pieza mucho más liviana y duradera que el Metal Hidruro.
Gracias al alto almacenamiento de carga, el usuario puede conectar su celular cuando pueda, porque su proceso de carga se divide en dos:
- Fase de carga rápida: Llega hasta a un 80%
- Fase de carga lenta: Conforme pasa el tiempo, el 20% restante se vuelve más tardado porque ya se tiene un porcentaje alto de pila.
De esta manera, es que las personas que cuentan con las Ion-Litio pueden dejar las preocupaciones de lado y concentrarse en otros asuntos que requieran de su completa atención.