La aplicación fue desarrollada con el supuesto fin de lograr la purificación sexual además de resolver problemas como: desordenes alimenticios, apuestas, abuso de sustancias y autolaceración a través de varios programas de 60 días que, según la cateogoría, muestran frases como la siguiente:
“A pesar de lo que hayas podido haber escuchado en otro lugar, no tienes un gen homosexual, ni naciste así sin una esperanza de ser libre. ¡Puedes liberarte de las cadenas de la homosexualidad a través del poder de Jesucristo y la cruz!”
La permanencia de esta app en las tiendas de Google y Apple ha causado controversia y la organización All Out –que trabaja por la igualdad LGBT– lanzó una campaña que pide a las compañías eliminarla.
Según Andre Banks, el director ejecutivo y cofundador de All Out, “los intentos para curar a la gente de su orientación sexual son absurdos, peligrosos y hasta ilegales en algunos estados y países… no hay ninguna evidencia que programas como Setting Captives Free funcionen”.
Lo que le preocupa a la organización es que pueda haber gente vulnerable que hasta pueda llegar a lastimarse si el “programa” no les da los resultados que esperan.