Bill Gates ha sido el objeto de una de variedad de teorías de conspiración de coronavirus que no han sido probadas o sustentadas.
Muchas de las teorías son relacionadas con su trabajo sobre vacunas, la financiación de su Fundación Bill y Melinda Gates y su interés en la salud mundial y las pandemias.
De acuerdo con un artículo publicado por The Washington Post, alrededor de 25 mil direcciones de correos electrónicos y contraseñas que parecen pertenecer a personas que trabajan en la Fundación Gates, la Organización Mundial de la Salud (OMS), los Institutos Nacionales de Salud y otras organizaciones que luchan contra el coronavirus como el Instituto de virología de Wuhan, fueron publicadas en línea por «activistas anónimos».
El diario atribuye su investigación a SITE Intelligence Group, que es una organización no gubernamental conocida por rastrear redes terroristas en línea.
La empresa de seguridad SITE Intelligence Group no ha confirmado si se trata de datos reales o no reales, pero un investigador australiano de ciberseguridad llamado Robert Potter afirma que al menos los usuarios y contraseñas de la OMS sí son reales.
El listado de contraseñas apareció inicialmente en 4chan y luego fue copiado a un Pastebin (aplicación web que permite a sus usuarios subir pequeños textos, generalmente ejemplos de código fuente, para que estén visibles al público en general) que todavía está disponible en la red.
A su vez, a través de distintos foros, han empezado a circular imágenes de que se ha accedido a supuesta información sensible relacionada con el coronavirus, generando preocupación y alarma en redes sociales.
La supuesta información filtrada señala el origen de la pandemia y advierte que el coronavirus «fue dejado a través de un bloque de hielo seco cerca de salida de aire en un mercado de pescado por tratarse de un lugar ubicado en el mismo edificio que el centro de la red ferroviaria de alta velocidad más grande del mundo».
¿Hay una conspiración real entre Bill Gates y el coronavirus?
Antes de señalar o asegurar cualquier cosa, es necesario destacar que los usuarios y contraseñas, al parecer, son reales en una parte, mientras que otras cuentas pudieron ser inventadas.
Las cuentas reales formarían parte de hackeos previos en el pasado, y al parecer alguna de ellas todavía funcionaba para acceder a algunas páginas, como es el caso de la OMS.
Por ello, no se trataría de un hackeo nuevo, sino de un intento de desacreditar a las organizaciones y fundaciones que están intentando luchar contra la pandemia de COVID-19, donde la fundación Gates ha apoyado a la OMS.
Hasta el momento, ninguna de las instituciones posiblemente hackeadas ha respondido de manera oficial para brindar explicación sobre el ataque cibernético.
The Washington Post también indicó que la Fundación Gates dijo que “están monitoreando la situación, pero no tienen pistas de que se haya producido una filtración”. Mientras tanto, el FBI también se negó a emitir comentarios.
Sin embargo, no es la primera vez de un falso hackeo a Bill Gates o a su fundación. Mientras se espera una voz oficial que aclare todo el asunto, lo mejor es minimizar el contenido divulgado por las redes sociales.
*Portada: Getty Images