Si estás leyendo esto significa que te gustan los extraños caminos de Internet y por eso conoces perfectamente este meme:
Al meme se le conoce como “Success Kid / Niño exitoso” y se utiliza para hacer referencia a una situación en la que, a pesar de la adversidad, se consigue el mejor resultado.
El niño, llamado Sam, tenía 11 meses cuando le tomaron la foto y su mamá, Laney, lo retrató justamente cuando estaba a punto de meterse un puño de arena a la boca.
Sam ahora tiene 10 años y en realidad lleva una vida normal, a pesar de ser uno de los rostros más identificables de la web.
Pero hubo una situación familiar en la que la «fama» de Sam fue crucial para salvar una vida.
El padre de Sam, Justin -un tatuador de 42 años-, vivía con falla de los riñones y por eso necesitaba diálisis constantemente.
Cuando su condición agravó, la familia se dio cuenta de que era imposible pagar los medicamentos para estabilizarlo y hacerlo aguantar hasta que llegara un trasplante de riñón.
Entonces llegó el momento decisivo: los hospitales le dijeron a Laney que debía garantizar que podía pagar los medicamentos de trasplante para registrar a Justin en la lista de espera.
El matrimonio creó una página en GoFundMe para recolectar donaciones.
Al principio Laney y Justin no querían agarrarse de la “fama” de Sam, pero luego ella decidió postear en su Twitter una liga a la página de donaciones y escribió “Si todos los que han creado un meme con Success Kid donaran un dólar, podríamos salvarle la vida a su padre”. Fue un movimiento clave.
Casi cinco mil personas donaron y se juntaron 101,125 dólares, de 75 mil que se necesitaban.
Justin tuvo su trasplante en 2015, vive feliz con su familia y ahora este meme cobra todo el sentido del mundo:
Internet sí sirve, como cuando te dice cómo utilizar groserías.