Facebook no para con sus características experimentales, y ahora su última incorporación al parecer irá en torno al tema de noticias falsas.
Mark Zuckerberg ha dicho que la red social hará más por hacer frente a la propagación viral de noticias carentes de credibilidad en su plataforma. Por esta razón, durante la semana, la compañía comenzó a experimentar con un sistema para solucionar el problema pidiendo ayuda a los propios usuarios.
Por lo menos tres usuarios de Facebook han publicado capturas de pantalla en Twitter de noticias que aparecen con una nueva encuesta de preguntas individuales debajo. La encuesta pregunta al usuario si cree que la publicación se caracteriza por ser de lenguaje engañoso.
Esta nueva herramienta propiciada por la red social, parece ser el primer ejemplo lanzado por Facebook en el que los usuarios deben ayudar a eliminar noticias falsas, convirtiéndoles en árbitros de la verdad.
Aunque Facebook no sea un medio de comunicación y su objetivo principal dista mucho de tener que estar informando, la sociedad sí ve a la red social como medio para enterarse de temas relevantes.
Por esta razón, la plataforma se ha enfrentado a miles de críticas que argumentan que la victoria de Donald Trump se derivó a que Facebook permitió la circulación de noticias falsas que sesgaron la toma de decisión de los ciudadanos al momento de ejercer su derecho en la votación.
Las publicaciones falsas han beneficiado a una serie de sitios que publican deliberadamente historias engañosas con la esperanza de que se vuelvan virales, al beneficio adicional de las redes publicitarias y los propios ingresos de Facebook.
En respuesta a los comentarios negativos, Zuckerberg afirmó que solamente el 1% de contenido en Facebook es falso y aseguró que es absurdo pensar que la red social influyera en el resultado de las elecciones.
Tiempo después, el creador de Facebook prometió fortalecer algoritmos para clasificar noticias falsas y hacer más fácil para los usuarios señalar el contenido como falso.
Sin embargo, la nueva herramienta de Facebook nos parece poco acertada, pues ahora el sistema podría ser manipulado y controlado por trolls o usuarios que no den la relevancia merecida a un contenido creíble y eficiente.
La opinión de cada individuo es tan subjetiva que no llevará a cabo ningún control establecido, ni ayudará a la filtración de noticias falsas en la red social. Incluso podrían desprestigiarse contenidos fundamentados por conflictos de intereses.