El mundo del entretenimiento no ha dejado de apostar por la tendencia del streaming. Ahora, al igual que plataformas como Netflix, HBO y Amazon Prime Video, Facebook producirá series y contenidos propios para mantener al margen de la vanguardia a los usuarios que conforman la red social.
Según el diario The Wall Street Journal, diversos estudios de Hollywood ya se encuentran trabajando para Facebook en un proyecto que podría revolucionar por completo la manera en que consumimos televisión a través de streaming. No significa que la idea sea nueva, pero por la cantidad de usuarios existentes en la red social, es muy probable que las televisiones tradicionales comiencen a ser desplazadas.
La red social de Mark Zuckerberg está dispuesta a pagar hasta tres millones de dólares por capítulo, una suma que posicionaría a Facebook entre las grandes productoras de televisión y contenidos por streaming, así que fácilmente competiría con otras cadenas y crecientes plataformas como Netflix o Amazon.
De acuerdo con los planes de Facebook, en los contenidos habrá variedad de todo tipo; es decir, los usuarios se encontrarán con series que irán para adolescentes hasta personas treinteañeras… en pocas palabras, los contenidos serán enfocados más a la generación millennial.
En teoría, las series comenzarán a emitirse en la nueva plataforma a finales de verano, entre septiembre y octubre del año presente. Aparentemente no podremos ver dramas políticos como House of Cards, o dramas penitenciarios como Orange Is The New Black o escenas eróticas como le encanta HBO, pues los géneros serán más ligeros y amigables para los públicos más jóvenes.
La noticia de Facebook no es ninguna sorpresa, pues sabemos que el streaming es la tendencia actual, por lo que todas las compañías tecnológicas que no busquen adaptarse, estarían quedándose atrás. Lo que sí sorprende es la inmediatez en la que los contenidos originales de Facebook se transmitirán.
Será cuestión de tiempo ver de qué manera la audiencia lo toma; quizá sea del agrado, o quizá sea un fracaso total. Hasta el momento no se tiene mucha noción sobre las temáticas abordadas, pero sin duda crear contenidos originales siempre será buena idea.
Referencia: The Wall Street Journal