Tuvimos que esperar mucho tiempo para que Sony por fin nos revelara los primeros detalles oficiales de la PS5, y aunque todavía hay muchas cosas por conocer de la consola de Sony, por parte de Microsoft básicamente solo hace falta conocer el precio y fecha exacta de lanzamiento para saber todos sus secretos.
Decidir que consola comprar únicamente por el hardware que incluye puede no ser lo más recomendable, y aunque Sony parece que solo ha revelado los detalles técnicos de la PS5, la realidad es que ha dejado ver mucho más de todas las palabras y detalles técnicos de la presentación. Por su parte, Microsoft, si ha sido mucho más claro sobre el camino que quiere tomar con su Xbox Series X.
¿Qué consola es mejor?
Lo primero que quiero dejar muy claro es que esta es mi opinión, cada quién tiene la suya y no por eso nos hace mejores o peores jugadores, a fin de cuentas, creo que lo más importante de apostar por una consola u otra es la estrategia y lo que hay más allá de la misma consola, y aquí Sony y Microsoft llevan caminos separados.
Sería increíble que todos pudiéramos comprar una PS5 y una Xbox Series X para tenerlas en casa, pero a veces la economía no da para darnos esos lujos, por lo que si tuviera que escoger solo una consola sería la Xbox Series X.
Y no, no me iría con Xbox porque en números es superior en casi todos los aspectos a la PS5, pues honestamente la diferencia es tan poca que a la hora de jugar no creo que la diferencia se vaya a notar, y si se nota, la verdad será tan mínima que en realidad no va a importar.
La razón por la que prefiero la Xbox Series X es porque Microsoft ha llegado a un punto de madurez en el que tiene muy claro a donde ir, y su propuesta a futuro me agrada mucho más que la de Sony y su PS5.
La Xbox Series X es mucho más que solo poder
No queda duda que la nueva generación de Sony y Microsoft no va a sufrir por potencia, jugar cualquier título ahí va a ser algo que vamos a gozar. Pero dejando de lado los teraflops, la velocidad de reloj o el almacenamiento SSD NVME, la verdad es que la primera razón que me convence de Xbox es su compromiso con la retrocompatibilidad.
Es un hecho que la Xbox Series X va a correr juegos de todas las generaciones de Xbox (y eso es una tarea difícil, pero que Microsoft lleva muchos años trabajando). Por otro lado, la retrocompatibilidad no solo abarca software, sino también hardware, y los controles de la Xbox One funcionarán perfectamente con la próxima generación.
En el caso de la PS5 Sony solo ha dicho que algunos juegos de PS4 y PS4 serán compatibles con la PS5, y no ha mencionado nada sobre si el DualShock 4 también funcionará con la nueva consola, por lo que ahí tengo el primer punto para inclinarme por la Xbox Series X.
El futuro de los juegos en la Nube
Si bien es cierto que la Xbox Series X no es el pilar de Project xCloud, sí es un complemento de este servicio, y la verdad es que Project xCloud es uno de los productos que más espero para este 2020. Lo que Microsoft nos ha mostrado sobre la capacidad de su servicio me ha dejado más que encantado, y uno de los pilares de este proyecto es la capacidad de convertir tu Xbox en un servidor para hacer streaming de los juegos que tienes en tu consola.
Por ahora Sony no ha revelado ningún plan de lanzar algo similar para complementar la experiencia de juego de la PS5. Además, PlayStation Now (el homólogo de Game Pass de Xbox) no está disponible en México, y algo que no me agrada es que Sony no incluya sus títulos triple A de lanzamiento en PlayStation Now cuando Xbox sí lo hace con Game Pass.
El punto a favor de la PS5 son las exclusivas
Donde Sony le saca ventaja a PS5 es en los juegos exclusivos, pues hoy en día no hay ningún juego exclusivo de Xbox que considere que esté al nivel de God of War o The Last of Us, y si los rumores se concretan y Sony se hace con las IPs de Silent Hill y Metal Gear, pues su catálogo de títulos exclusivos va a ser simplemente abrumador.
Y aunque las exclusivas de Xbox no son legendarias, tampoco están mal, y prácticamente el 95% de los juegos que me gustan y emocionan son multiplaforma, así que tampoco es que sufra demasiado si no puedo jugar desde el día 1 uno de los mejores juegos de PlayStation.
Si bien es cierto que Microsoft ha prometido mejorar notablemente este apartado para este año, todavía creo que hará falta algo de tiempo para que la empresa esté al nivel de Sony en este apartado, sin embargo, todo lo demás me deja totalmente convencido de que la consola por la que debo apostar para fin de año es la Xbox Series X.