Después de la terrible recepción a la gris versión beta de Visual Studio 11 (VS 11), Microsoft parece que ha escuchado las quejas correspondientes y ha añadido un poco de color a la interfaz. Los desarrolladores no necesariamente son grandes diseñadores y programar no tiene como prerrequisito que se tenga buen gusto o estilo, pero todos parecemos entender que hay un estándar mínimo que debe seguirse. Resulta realmente poco lógico que habiendo pantallas que despliegan 16 millones de colores, tengamos que vivir en VS 11 en una interfaz gris, depresiva.
Microsoft, tomando en cuenta todas estas quejas, ha mencionado en su blog que la interfaz de VS 11 se centra en tres aspectos:
- Un deseo de una ‘energía’ visual y contraste (de verdad, no sé qué quieren decir con esto).
- Un deseo de hacer las cosas más al estilo Metro.
- Un deseo de hacer los iconos más claros y diferenciarlos a través del uso del color.
El primer punto parece asociar esta ‘energía’ visual al color, de hecho, se han reemplazado los íconos por unos con más color, pero aún no se ven totalmente coloridos. Es como si el departamento de diseño los hubiese cambiado de acuerdo al grado de saturación de color.
Llama la atención que en aras de un supuesto diseño gráfico de avanzada se elimine el color de la interfaz de VS 11, cuando una de las virtudes de cualquier computadora moderna es precisamente el despliegue que puede hacer en colores.
Fuente: i-programmer