El menú de inicio renovado mezcla las opciones “antiguas” con los mosaicos que aparecieron en Windows 8, y el objetivo de esto es que el usuario de PC de escritorio se sienta más cómodo con la interfaz “tradicional”, pues existen quejas de que el sistema Metro, con recuadros de colores en pantalla completa, no fue del agrado de muchas personas que prefieren el mouse a una pantalla táctil.
En el menú se pueden activar opciones para cada programa usando el clic derecho, y más interesante aún, los mosaicos de la derecha se pueden redimensionar para mostrar más o menos información. Estos recuadros conservan la funcionalidad de actualizarse constantemente con datos de interés.
Por otro lado, un segundo video comprueba que aquellos que no sienten agrado por los mosaicos de Windows pueden simplemente removerlos para quedarse con un menú completamente al estilo original del sistema operativo. Lo único que varía ligeramente es la combinación de colores.
Así es que, para cuando llegue Windows 9, los usuarios podrán tener el sistema que les guste más. Quienes lo prefieran con el look clásico, podrán configurarlo, y a quienes les agradó lo que se hizo con Windows 8 y posterior, podrán conservar la mayoría de las características que ya se conocen.
Referencia: WinFuture