Según reporta The Huffington Post, junto con otros sitios, la campaña de Romney tenía una poderosa arma que habría ayudado en buena parte a granar las elecciones. Esto fue producto de una sistema llamado Project ORCA, que a grandes rasgos, consistía en una aplicación desde la que los ayudantes del candidato en cada región electoral tendrían acceso a la tendencia de voto en tiempo real (obtenido a través de encuestas), de manera que en aquellos lugares donde se estuviera perdiendo, se pudiera estimular nuevamente a la gente para elegir al partido republicano.
Desafortunadamente para esta causa, la aplicación sufrió desperfectos en el momento que tendría que haber operado, dejando a todos los voluntarios que tenían acceso a ella fuera de la jugada. En teoría, el uso de este software habría sido mucho más efectivo que hacer llamadas para saber dónde se requería dirigir a los votantes, pero ante la contingencia, no hubo forma de que el programa afrontara el reto impuesto.
Otra de las causas por las que ORCA no funcionó como debía, es que muchos de los voluntarios no tenían la capacitación necesaria para hacer uso de esta tecnología. Según se ha dicho, mientras que ORCA era una web app que tendría que ser accedida a través del explorador del teléfono, parte del personal entendió que se trataba de una aplicación nativa, que podría ser hallada en el menú del dispositivo.
También se dio a conocer que parte de los encargados de la campaña recibieron cientos de llamadas de los voluntarios que no encontraban la manera de utilizar la aplicación. Según se dijo al sitio Breitbart.com, cuando los usuarios ingresaban las contraseñas o alias, estos estaban mal y no permitían el acceso al sistema.
The Huffington Post recibió la declaración de Andrea Saul, vocera de la campaña de Romney, días antes de la elección. Según ella, el uso de Project ORCA traería a su equipo una “enorme ventaja en el día de la elección”. La estructura de la que el personal a cargo de este proyecto se jactaba terminó siendo un fracaso, a pesar de ser un sofisticado sistema que captaría la información en tiempo real desde los teléfonos inteligentes para ubicar en qué sitios era necesario centrar la atención.
La información respecto a este caso parece difícil de creer, sobre todo tratándose de un proyecto tan ambicioso como el de colocar al candidato republicano de uno de los países más poderosos al mando del mismo, pero en realidad es el resultado de un software “primerizo” que no fue probado correctamente en su etapa beta, según dijo Zac Moffat, Director Digital de la campaña de Romney, al sitio CNET.
“El problema principal fue que hicimos las pruebas beta en un entorno diferente al de Garden (el estadio Boston Garden, donde el personal de la campaña estaba trabajando). Había tanta información llegando – 1200 registros o más por minuto – que hizo que el sistema cayera por un tiempo. Los usuarios estaban frustrados por el retraso, y algunas personas nos dejaron y experimentamos desgaste como resultado,” dijo Moffat.
Algunos titulares han señalado que este error pudo haber costado la elección a Romney, mientras que otros sólo dicen que se perdieron miles de votos, más no que esta falla haya sido el factor decisivo para que el partido republicano perdiera ante el demócrata. No es claro cuál sea el verdadero impacto, pero al menos debió ser una importante lección para todo el equipo que colaboró con Romney.
Referencia: The Huffington Post, CNET, The Verge