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Un vegetal fractal al alcance de todos

Hoy hallé en la sección de frutas y verduras algo fascinante: el romanescu. Jamás había visto semejante vegetal en los supermercados y es impresionante porque...

Hoy hallé en la sección de frutas y verduras algo fascinante: el romanescu. Jamás había visto semejante vegetal en los supermercados y es impresionante porque es en realidad una imagen tridimensional de un fractal. Este es uno de los ejemplos más llamativos de que la Naturaleza, sí, con N mayúscula, está seriamente involucrada con los fractales, descubiertos, o inventados (¿?) por Mandelbrot. El romanescu es una estructura cónica con protuberancias también cónicas más pequeñas que se forman a su vez de otras estructuras cónicas, y así sucesivamente. Esto se entiende con el término “autosimilaridad” .

El romanescu (Brassica oleracea), es un híbrido de brécol (Brassica oleracea var. italica) y coliflor (Brassica oleracea var. botrytis) de la familia de las brasicáceas. El brécol romanescu fue documentado inicialmente en Italia (como Broccolo romanesco) en el siglo XVI. Como todas las especies de esta familia, es rico en vitamina C, fibra soluble y carotenoides. Se suele consumir cocido o al vapor aunque también se suele utilizar como verdura cruda. Una de sus más llamativas características es que presenta geometría fractal en su estructura.

De acuerdo con la Wikipedia: Un fractal es un objeto geométrico cuya estructura básica, fragmentada o irregular, se repite a diferentes escalas. El término fue propuesto por el matemático Benoît Mandelbrot en 1975 y deriva del Latín fractus, que significa quebrado o fracturado. Muchas estructuras naturales son de tipo fractal. La propiedad matemática clave de un objeto genuinamente fractal es que su dimensión métrica fractal es un número no entero.

Como los fractales tienen unas matemáticas asociadas muy claras, existen muchos programas para generarlos con la computadora. Lo interesante es que al final de cuentas entender que esto es un modelo que la naturaleza expresa en fenómenos cotidianos. Existen muchos programas para crear fractales, pero la mayoría trabaja con autómatas celulares undimensionales, conjuntos de Julia, etcétera. No he hallado, de hecho, un programa que haga fractales al estilo de la verdura Romanescu.

Sin embargo, hallé en esta página un interesante ejemplo utilizando las capacidades de scripting de Renderman, el programa de gráficas tridimensionales de Pixar, con el que se han generado muchas de las imágenes de películas como Toy Story, Cars, Monsters Inc., etcétera. El autor de la página eligió precisamente la verdura romanescu, la cual está compuesta de espirales colocadas en segmentos que son idénticos de toda la planta. El proceso continúa hasta el infinito como una forma fractal en 3D. “La belleza matemática y la simplicidad de esta verdura no deja de asombrarme”, escribe el autor de ese sitio web.

De acuerdo con Alexandar Rodic, el rendereo de cuatro generaciones de brócoli (porque el romanescu es un brócoli), es extremadamente lento por el inmenso número de conos (unos 1600 millones de conos cuadráticos). Las imágenes finales se renderizaron con After Effects.

Cuando vi el romanescu me la compré (24.90 pesos) sin pensarlo demasiado y más adelante Pilar Doporto tomó las magníficas fotos que ilustran este artículo. Si quieren ver en vivo este vegetal, vaya a su supermercado más cercano). Vale la pena el gasto simplemente por el valor estético visual de este fractal natural.

 

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