Tim Cook, la persona que dirige a la compañía más valiosa del mundo, se sinceró en una columna para Bloomberg, en la que hizo pública su orientación sexual y se mostró orgulloso y afortunado de ser gay,
“Por años, he sido abierto con muchas personas acerca de mi orientación sexual. Mis colegas en Apple saben que soy gay y no hace ninguna diferencia con la manera en la que soy tratado. Por supuesto, tengo la fortuna de trabajar en una compañía que ama la creatividad y la innovación y sabe que sólo pueden florecer cuando abrazas las diferencias de las personas. No todos son tan afortunados”.
A pesar de que en su círculo cercano nunca había negado su orientación sexual, esta es la primera ocasión en la que Tim Cook lo acepta públicamente; en donde, además, considera ser gay como uno de los regalos más grandes que Dios le dio.
“A través de mi vida profesional, he tratado de mantener un nivel básico de privacidad. Vengo de raíces humildes y no busco atraer la atención hacia mí. Apple es una de las compañías que son observadas más de cerca en el mundo y me gusta atraer la atención en nuestros productos y las increíbles cosas que nuestros clientes hacen con ellos”.
En su carta, Tim Cook explica que ser gay le ha permitido entender cómo es ser parte de una minoría y las complicaciones que esto representa, así como permitirle ser más empático y alcanzar así una vida más rica. Además, aceptó que el camino no ha sido fácil, pero que ha tenido la confianza de seguir su camino.
“No me considero un activista, pero entiendo cuánto me he beneficiado por el sacrificio de otros. Entonces, si escuchar que el CEO de Apple es gay puede ayudar a alguien en conflicto para acercarse a quien en realidad es o dar confort a alguien que se sienta solo o inspire a personas a insistir en su igualdad, entonces el trato a cambio de mi privacidad vale la pena”.
La publicación de la columna de Tim Cook generó revuelo en las redes sociales y confirma que el mundo es cada vez más abierto y que no debe de existir ningún pudor en aceptar quien uno es, sin importar si se trabaja en Apple, Google o en cualquier compañía del mundo.
Referencia: Bloomberg