Pero ¿la gente se orina dentro de la alberca o no? En una encuesta hecha por el Consejo de la Calidad del Agua y la Salud, uno de cada cinco adultos admitió orinar en las albercas, y siete de cada diez dijo que no se bañaba antes de meterse a la piscina. De acuerdo con un artículo de Carly Geehr, del equipo nacional de natación de los Estados Unidos, «cerca del 100% de los nadadores de elite se orinan en las albercas. Algunos lo niegan regularmente mientras que otros se jactan de ello. La cuestión es que todos lo hacen».
Otro mito interesante es que salir de la alberca con los ojos rojos después de nadar es el resultado de que haya demasiado cloro, pero de hecho, es al revés: una alberca apropiadamente balanceada solamente deja restos de los químicos que se usan en ella y los ojos rojos son causados por la cloramina, un subproducto químico producido por la oina, la perspiración o bien, por los productos de belleza presentes en una alberca sucia.
Referencias: