La empresa THQ, reconocida por desarrollar y publicar importantes títulos de videojuegos, se declaró hoy en bancarrota bajo el llamado Chapter 11. Esta marca está detrás de franquicias como Saints Row, Dark Siders y las populares ediciones de la WWE.
El Capítulo 11 permite que la empresa en bancarrota lleve a cabo una reorganización. En consecuencia, THQ venderá sus derechos y propiedades a Clearlake Capital Group, firma de inversiones que se encargará de subastarlos y que permitirá a THQ “deshacerse de ciertas obligaciones heredadas y emerger con un respaldo financiero fuerte de un nuevo propietario con experiencia substancial en software y tecnología,” indica The Wall Street Journal.
THQ pretende que la compra se realice en máximo 30 días; ésta se hará por un valor de 60 millones de dólares. Entre tanto, la empresa no anunció que vaya a haber despidos, y los empleados seguirán recibiendo su paga habitual y trabajaran como acostumbran.
“La venta y clasificación [de bancarrota] son necesarias para completar los siguientes pasos en la transformación de THQ y posicionar a la compañía para el futuro, y conservamos confianza en nuestra gama existente de juegos, la fortaleza de nuestros estudios y el profundo talento del equipo de THQ,” dijo Brian Farrell, Jefe ejecutivo de THQ para The Wall Street Journal.
Los juegos Company Heroes 2, Metro Last Night y South Park: The Stick of Truth, continurán en dearrollo para ser publicados tal como se había planeado, y las secuelas para Saints Row y Homefront sí se llevarán a cabo.
Referencia: THQ, The Wall Street Journal