El motor doble de este vehículo se encuentra ubicado uno al frente y otro detrás, impulsando al automóvil a una velocidad mayor (con aceleración de 0 a 100 km/h en 3.2 segundos) y un consumo menor de energía al que ya se tenía con el primer Model S.
Bajo ciertas circunstancias de clima difícil, el vehículo usará el motor que sea más adecuado para seguir desempeñándose correctamente en el camino, pero cuando se esté en una autopista apropiada, ambos motores pueden entrar en acción para llegar a una velocidad máxima de 250 km/h.
La versión P85D, con motor dual, tendrá un precio de 120 mil dólares, aunque Tesla aplica ciertos descuentos para incentivar el uso de autos eléctricos.
Esta versión tiene un total de 691 caballos de fuerza al combinar ambos motores, además, puede ser usado por 440 kilómetros con una sola carga a una velocidad promedio de 105 km/h.
Otra función llamativa es la del piloto automático. Cuenta con un radar frontal que puede ver a través de nieve, neblina y otros elementos del camino; se combina con una cámara con reconocimiento de imagen que puede identificar cosas como las luces del semáforo o las señales de velocidad máxima.
Finalmente tiene un sonar que rastrea lo que está alrededor del auto, así como navegación GPS para conducirse a sí mismo en ciertas condiciones.
Por ejemplo, Musk señaló que el usuario podría llegar a la puerta de su casa y dejar que su auto se estacione automáticamente en el garaje. Aunque todo esto suena espectacular, el sistema necesitará actualizaciones progresivas para llegar a un punto donde el vehículo se maneje a sí mismo en situaciones más cotidianas, como al ir en una autopista.
Los automóviles de Tesla han pasado por situaciones diversas, desde el reconocimiento por su diseño y prestaciones hasta las críticas por supuestos defectos de fabricación que permiten que el vehículo se incendie en caso de colisión.
Referencia: Tesla