Los termómetros infrarrojos funcionan de acuerdo al fenómeno físico por el cual los cuerpos calientes emiten calor en forma de radiación electromagnética. La cantidad de energía emitida es proporcional a la temperatura y la emisividad, que es la proporción de radiación térmica emitida por una superficie u objeto, y que puede tener un valor de 0 como un espejo brillante, reflector perfecto a 1,0 como un radiador de Planck, emisor perfecto. Todo cuerpo por encima del cero absoluto emite radiación.
En resumen los termómetros infrarrojos utilizan una serie de lentes para recoger la luz infrarroja emitida por el objeto enfocándola hacia un detector que convierte esta energía en una señal eléctrica para su lectura.
La cámara de infrarrojos del dispositivo de Fraden mide 5 x 5 x 5 mm de tamaño, por lo que es posible su uso en los teléfonos inteligentes, tiene un rango de -30 ° C a 204 ° C, suficiente para comprobar desde si el niño tiene fiebre hasta saber si la cocción del pavo es la adecuada y todo esto con una respuesta en menos de un segundo.
“La mayoría de los modelos de teléfonos inteligentes difieren poco unas de otras, con sólo pequeños cambios evolutivos. El proveedor con funciones innovadoras para el uso cotidiano mundo real, como la lectura de la temperatura de un niño, puede distanciarse de sus competidores. Creemos que esta nueva patente puede ser un diferenciador competitivo importante para un fabricante de teléfonos inteligentes”, dijo el Dr. Fraden.
Este no es el primer dispositivo infrarrojo para tomar la temperatura desde un smartphone, anteriormente habíamos hablado del Thermodock el cual es un dispositivo periférico especialmente para el iPhone o el iPad que usa la misma tecnología. La diferencia es que además de ser un accesorio, tiene un costo de $96 dólares pero por las palabras del Dr. Fraden tal vez la próxima generación de smartphones ya cuente con esta tecnología de forma nativa.
Referencia: Fraden Corporation