De acuerdo con un reporte hecho por Deezer, el consumo de música en streaming aumentó 43% el año pasado, mientras que las descargas y formatos físicos disminuyeron 10.5% y 4.5% respectivamente.
Esto representa un cambio importante, ya que de acuerdo con dicho informe, después de dos décadas en las que no se observó algún cambio significativo, 2015 fue crucial en la evolución de la industria musical, ya que los ingresos por formatos digitales superaron de forma notoria a los físicos debido a la rápida adaptación de la industria a la era digital, volviéndose más fuerte y competitiva.
Al parecer, este crecimiento se debe principalmente a la disminución de descargas y ventas de formatos físicos, incrementando los ingresos por streaming. Cabe resaltar que estas ganancias son por servicios premium y gratuitos que incluyen anuncios publicitarios, los cuales en conjunto generan un total de 43% de ingresos, sólo dos puntos porcentuales por debajo de las descargas digitales que abarcan el 45% actualmente.
Este cambio tuvo un impacto importante en las compañías disqueras, las cuales después de una década de declive, ofrecieron nuevas propuestas a los clientes de acuerdo a su comportamiento en esta época, adquiriendo nuevas licencias, ampliando sus servicios, buscando inversión continua e innovando con nuevas propuestas musicales dándolas a conocer al mundo entero a través de servicios de streaming.
Por su parte, Latinoamérica fue, por quinto año consecutivo, la región con el más alto nivel en ingresos por música grabada (+11.8%). Asimismo los ingresos por música digital llegaron a 44.5%, cuatro veces más que el promedio global, mientras que los ingresos por streaming aumentaron 80.4%, manteniendo a Brasil (-1.8%) y Argentina (+34.8%) como los dos mercados más grandes de la región.
Referencia: Deezer