Ahora más que nunca nos encontramos en el centro de la discusión sobre SOPA (Stop Online Piracy Act), la iniciativa estadounidense para detener la piratería en línea, actualmente en la Cámara de Representantes de ese país. Adicionalmente, el Senado de Estados Unidos ha presentado una propuesta similar llamada PIPA (Preventing Real Online Threats to Economic Creativity and Theft of Intellectual Property Act) para prevenir las amenazas reales en línea para la creatividad económica y el robo de propiedad intelectual.
Cabe recordar que ya opera una legislación en ese país desde 1998, denominada Digital Millenium Copyright Act, con la capacidad de retirar material ilegal en línea pero aplicable exclusivamente de forma nacional. Esto es, sólo aplicable a páginas radicadas en Estados Unidos. Esta fue la principal motivación para desarrollar las nuevas iniciativas de corte bipartidista pero que tienen componentes altamente discrecionales y xenofóbicos.
Sin embargo, la Casa Blanca anunció el sábado pasado que no apoyará estas iniciativas por tener impactos en la libertad de expresión y la innovación en Internet. En concreto, el equipo encargado de los temas tecnológicos de la presidencia de Estados Unidos, encabezados por Aneesh Chopra, Victoria Espinel y Howard Schmidt, declaró que: “si bien creemos que la ‘piratería’ de sitios de la red extranjeros es un problema grave que requiere una respuesta legislativa seria, no apoyaremos leyes que reduzcan la libertad de expresión, aumente los riesgos para la seguridad en el área cibernética o socaven una red global dinámica e innovadora”.
Por su parte, los gigantes de internet, encabezados por Google, Amazon, eBay, PayPal, Expedia, Wikipedia y Yahoo, han mostrado públicamente su oposición a SOPA y PIPA de forma organizada por medio de netCoalition.com. E incluso se llegó a especular sobre un apagón de sus servicios en línea para el 23 de enero como forma de protesta. No obstante, las únicas empresas que han asegurado su apagón son Wikipedia, Reddit, Mozilla y FailBlog que harán inaccesible su contenido en inglés mañana miércoles 18 de enero.
Por su parte, Google ha mencionado que pondrá un link en su página principal de búsquedas como protesta ante estas iniciativas. Esto último me parece más racional que dejar sin servicio de búsqueda a cientos de millones de personas y con un impacto similar.
Pero bueno, ya comentamos lo que no se quiere de esta legislación. Aquí es importante comprender dos temas entrelazados; primero, la piratería es una conducta lastimosa para el desarrollo de cualquier industria; y en segundo lugar, la tecnología ha modificado radicalmente los modelos de negocio de bienes y servicios protegidos por la propiedad intelectual reduciendo a los intermediarios y rebalanceando el poder de negociación tanto de los creadores como de los consumidores.
Alternativamente, existe un borrador de propuesta apoyada por Google y Facebook llamada OPEN (Online Protection & Enforcement of Digital Trade Act), una iniciativa para la protección en línea y aplicación de la ley de comercio digital, la cual propone penalizar a los sitios cuya función “principal” sea infringir los derechos de autor y no a las páginas de contenido generado por usuarios, agregadoras/mash-ups tipo Stumbleupon, Reddit, Youtube, Twitter y Facebook, entre otros.
La mayor diferencia entre SOPA-PIPA y OPEN radica en el objetivo a quién apunta la ley. Es decir, en el caso de SOPA y PIPA cualquier página que contenga material o liga a material protegido por el derecho de autor será bloqueado su acceso. En contraparte, en la iniciativa OPEN se censurarán las páginas, nacionales y extranjeras, cuya finalidad principal sea la de violar la propiedad intelectual, no así cerrar el internet ni la libertar de expresión.
El impacto que pudiera tener cualquier bloqueo a páginas en Estados Unidos tendrá un impacto en América Latina, ya que una gran proporción de los contenidos y servidores viajan por nuestro vecino del norte. Ya algunos legisladores mexicanos quieren mostrar su oposición a las iniciativas estadounidenses, sin embargo, no podemos hacer mucho desde nuestras trincheras más que vigilar que en nuestros países no se aprueben iniciativas similares.
La fecha propuesta para debatir las iniciativas SOPA y PIPA es el próximo 24 de enero, y las acciones en protesta se realizarán mañana 18 de enero. Hemos visto gran activismo en las redes sociales y, aunque los políticos creen que no existe memoria de los votantes, no toman en cuenta que el Internet no olvida, ¿tú lo olvidarías?