En la actualidad, las necesidades de mejoramiento en los medios de transporte y movilidad se han vuelto de vital importancia en la cotidianidad de los ciudadanos. Con problemas de congestionamiento en el tránsito y sobrepoblación, ya no basta con los servicios tradicionales que están a disponibilidad para todos en las ciudades. Además, la inseguridad se ha vuelto un tema realmente controversial, ya que los habitantes corren riesgo constantemente con el simple hecho de satisfacer una necesidad básica y necesaria: la movilidad.
Ante los problemas de saturación e inestabilidad en los medios de transporte públicos, han surgido iniciativas y alternativas para brindar a los ciudadanos mayor comodidad, confianza y seguridad en términos de movilidad. Opciones como Uber, Cabify, Avant, Easy Taxi, Yaxi y City Drive, han llegado para ofrecer un mejor servicio a los pasajeros; más exclusivo, seguro, cómodo y económico.
Por otro lado, nuevas ofertas de transporte privado colectivo han llegado para facilitar la movilidad sin la necesidad de un medio exclusivo, a diferencia de otras plataformas como las mencionadas anteriormente. Urbvan y Jetty son claros ejemplos de estas nuevas alternativas. Sin embargo, ambas compañías no han sido aceptadas de la mejor manera, ya sea por ataques por parte de transportistas como sucedió con Uber cuando inició y sufrió agresiones de los taxistas, o por cuestiones de permisos para operar.
¿En qué consiste Urbvan y por qué está teniendo problemas con las autoridades y el Gobierno de la Ciudad de México?
Con el éxito de Uber como medio de transporte privado, surge una nueva alternativa de movilidad privada y colectiva. Urbvan ofrece la posibilidad de transportarse mediante camionetas cómodas y totalmente equipadas; desde WiFi, hasta cámaras de seguridad de circuito cerrado y aire acondicionado con el fin de que los pasajeros tengan una experiencia más amena y cómoda en sus traslados. La forma de operar consiste en partir desde puntos específicos de la ciudad para comenzar con horarios ya establecidos, comenzando desde las 7:00 am para continuar cada hora. Sin embargo, el pasado 15 de agosto, la compañía se vio bajo la necesidad de suspender su operación por problemas con las autoridades. A través de un comunicado oficial, Urbvan reveló lo siguiente:
«Tuvimos una incidencia con las autoridades por supuestas irregularidades en el permiso que nos regula igual a las plataformas de movilidad ya existentes. Los problemas persistieron al inhabilitar un gran número de nuestras unidades; dejando así a más de 3 mil usuarios sin una opción digna de transporte.»
Ante dicha situación, Urbvan aseguró que empeñará grandes esfuerzos para esclarecer al Gobierno de la Ciudad de México, los acuerdos asentados en la gaceta oficial, donde certifican que la plataforma de Urbvan cuenta con las constancias de registro para operar transporte privado a través de una aplicación móvil.
En redes sociales, los usuarios pasajeros de Urbvan han estado manifestándose bajo hashtags como #SoyUrbvan y #NecesitoUnMejorTransporte
Jetty comienza con el pie izquierdo en su primer día de operación a causa de los transportistas
Por otro lado, tenemos a Jetty, un servicio de transporte colectivo contratado vía app que funciona de forma similar a Urbvan. El pasado 15 de agosto, Jetty comenzó a cubrir la ruta Lomas Verdes-Polanco con reservaciones, pero su operación fue impedida en el primer día. Para comenzar, la compañía utilizó camionetas tipo Van, pero transportistas del Estado de México retuvieron una unidad de Jetty e impidieron su avance. Justo como sucedió con Uber cuando la compañía llegó a México y los taxistas aprovecharon el momento para embestir en su contra. A través de la cuenta oficial de Jetty, podemos observar una imagen en la que los transportistas se encuentran bloqueando el transcurso del primer viaje.
Durante la discusión, la compañía afirmó que uno de los transportistas ponchó una llanta del transporte colectivo privado. Y, ante la situación, amenazaron con dañar todos los vehículos si continuaban operando.
Con el fin de conocer más sobre alguna respuesta oficial por parte de la compañía, nos pusimos en contacto a través de su cuenta en Facebook para definir su postura en la que nos respondieron lo siguiente:
«Tenemos los permisos necesarios para operar en el Estado de México y la Ciudad de México como proveedor de servicios electrónicos de transporte privado. En ambos estados, son permisos regulados por las secretarías de finanzas. No hemos tenido problema con el gobierno, sino con los transportistas de la ruta del área en la que íbamos a dar servicio. Nos detuvieron y nos amenazaron.»
Después de lo ocurrido en el Estado de México, la Secretaría de Movilidad (Semov) mencionó que la compañía no tenía el permiso para operar, siendo que, según afirma Jetty, cumplieron con todos los requisitos para funcionar y cuentan con licencia de operación.
La Semov, a través de su cuenta oficial en Twitter, aseguró que Jetty no cuenta con ningún permiso para operar.
Cuestionamos a la compañía sobre lo que procedería y nos respondieron que por el momento no habrá servicio hasta que pueda volver a garantizarse. «Haremos todo lo que esté de nuestra parte para subir a los transportistas a Jetty, pero ni un paso atrás en mejorar el servicio«.
Como suele suceder con las compañías de transporte privado, siempre habrán adversidades ante los permisos legales, restricciones del gobierno e inconformidades de los que manejan medios de transportes públicos. Estaremos al tanto de más información oficial y daremos seguimiento al caso de ambas compañías, tanto de Urbvan como de Jetty.