Después de años de teorías de conspiración, rumores y referencias mediáticas, la CIA por fin ha confirmado la existencia del Área 51 en Estados Unidos.
Según reportes de The Atlantic Wire, la información viene de un detallado –y antes clasificado– reporte de 407 páginas que explica lo que se hacía en el sitio.
En muchos elementos de la cultura popular se ha descrito al Área 51 como un lugar remoto en el desierto de Nevada. Se supone que ahí el gobierno llevaba a cabo experimentos extraños con alienígenas durante la época de la guerra fría y el conflicto con los soviéticos. Un ejemplo claro de la idea que se tiene sobre el Área 51 es la representación que aparece en Indiana Jones and the Kingdom of the Crystal Skull, donde los soviéticos se infiltran a la base para robarse un misterioso objeto que tiene que ver con unos seres alienígenas.
No hace falta decir que el reporte real no menciona ninguna cosa de este tipo y en vez de eso, explica que el Área 51 era utilizada como una base para el programa U-2 de naves de espionaje. Antes de que fuera usado para esto, el lugar sirvió en la Segunda Guerra Mundial como un sitio de práctica para ataques aéreos del Army Air Corps. En el reporte se cuenta que figuras del proyecto U-2 iban volando en un avión cuando casi deciden aterrizar el la vieja base.
“El 12 de abril de 1955, Richard Bissell y Osmund Ritland volaron sobre Nevada con Kelly Johnson en una pequeña nave Beechcraft piloteada por ej jefe de pilotos de prueba de Lockheed, Tony LeVier. Vieron lo que parecía ser una pista de aterrizaje por Groom Lake… Después de debatir sobre si debían aterrizar en la vieja pista, LeVier aterrizó en el lago y los cuatro caminaron a examinar la pista. Desde el aire parecía estar pavimentada, pero de cerca resultó que originalmente estaba hecha de tierra compacta que ahora era polvo después de una década de no usarse. Si LeVier hubiera intentado aterrizar ahí, el avión tal vez se habría hundido y hubiera matado o lastimado a las figuras clave en el proyecto U-2.”
El documento también revela que Área 51 no se debía llamar así ya que no resultaba atractivo. Después de que Einsenhower –el presidente en turno– aprobara la adición de esa parte del desierto al sitio de pruebas de Nevada, el lugar fue llamado “Paradise Ranch” (luego abreviado a Ranch). El nombre nunca se quedó y en vez de eso se le comenzó a llamar Área 51 al territorio.
El gobierno ya había mencionado el Área 51 en distintos documentos y proyectos, pero nunca se había había reconocido oficialmente la existencia de la base. Los fans de la ciencia ficción y los extraterrestres (igual que yo) estarán decepcionados de saber que la CIA ni siquiera mencionó experimentos dudosos con el chupacabras o seres interdimensionales.
Referencia: The George Washington University, The Atlantic Wire