El gobierno mexicano anunció el lunes la entrada en vigor de un programa de retención y pago de impuestos para los choferes y repartidores de las principales plataformas digitales de transporte compartido.
Algunas de las compañías que serán partícipes de este nuevo programa son Uber, Cabify y Rappi. Estas actuarán como agentes retenedores de sus socios conductores registrados en sus plataformas.
Este nuevo esquema comenzaría a implementarse el 1 de junio con una tasa de retención mensual del IVA del 8% y del Impuesto Sobre la Renta (ISR) del 3% a 9%, según el SAT.
¿El servicio de Uber sería más caro con esta nueva regulación?
De acuerdo con El Financiero, las tarifas de Uber y las ganancias de los socios conductores no se verán afectadas con el acuerdo de retención logrado entre los servicios de transporte privado y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
El Director Fiscal de Uber México, Víctor Díaz Infante, aseguró que se trata de obligaciones fiscales con las que ya se cumplían.
«No implican impuestos nuevos que suban las tarifas, ahora simplemente les vamos a facilitar que en lugar de estar presentando declaraciones de forma mensual o bimestral, dependiendo de su régimen fiscal, ahora nosotros nos encargamos de retenerlo a una tarifa reducida y lo vamos a pagar«, señaló en entrevista.
De acuerdo con Díaz Infante, se consiguió una tarifa reducida para conductores.
«Lo que pasa es que conseguimos una tarifa reducida de ISR para ellos y les facilitamos toda la carga administrativa«, aseguró.
Esto quiere decir que la empresa le hará la declaración mensual a los socios conductores para que ellos únicamente se encarguen de la anual, pero no se les quitará nada.