Samsung publicó los beneficios trimestrales y sufrió un desplomo del 69% que significan 3,400 millones de dólares hasta diciembre del 2022, su peor caída en 8 años para la compañía surcoreana.
La empresa aseguró que esta caída se debe a la baja en la demanda mundial de chips de memoria y teléfonos inteligentes que no tuvieron tantas ventas por la inflación y ralentización económica.
La compañía sufrió un duro golpe para finalizar el 2022, aunque no es la única que pasó un mal momento, pues otras marcas y conglomerados tuvieron que hacer despidos y tomar medidas para salvaguardar sus finanzas.
Samsung es golpeada por la crisis económica
Samsung registró ventas de 55,000 millones de dólares en el último trimestre del 2022, lo que supone un descenso del 8,6% respecto al mismo periodo del año 2021.
«En medio de continuas incertidumbres externas, incluida una posible desaceleración económica mundial, los beneficios globales disminuyeron bruscamente de un trimestre a otro, ya que vimos una caída significativa en los resultados del negocio de memoria debido a la escasa demanda y a la debilidad de las ventas de teléfonos inteligentes».
La empresa buscó soluciones para mejorar la situación y una de ellas podría ser la baja de precios, pues si bien no ingresarían lo que buscan, es necesario vender sus productos para mantener en marcha sus operaciones comerciales e industriales.
Samsung recibirá apoyo por parte del gobierno de Corea del Sur, pues las compañías de semiconductores se beneficiarán de una desgravación fiscal del 15% al 8%, esto con la intención de que no sufran más golpes económicos.
La empresa buscará más soluciones para esta situación que sin duda es insostenible por mucho tiempo, pues el riesgo es grande para una marca tan importante.
Los dispositivos deberán encontrar un mercado que los consuma mientras los chips bajarán de precio, si no es posible que veamos un estancamiento prolongado.