Este mundo moderno de computadoras en un sinfín de actividades humanas y de Internet hasta en la sopa es una demostración que el mundo ha cambiado considerablemente. Hoy en día la red de redes se acerca a la omnipresencia y es claro que su influencia y alcance no nos es ajeno. Las redes sociales han tomado por asalto la vida cotidiana y diariamente millones de personas se conectan a estos sitios de Internet y los “enriquecen” con sus propias ideas y argumentos.
Desde luego que esto tiene pros y contras. Umberto Eco, escritor y filósofo italiano, dijo ya que las herramientas como Twitter y Facebook “dan el derecho de hablar a legiones de idiotas”. Y es cierto que más que nunca, hay que ser mucho más cuidadoso con lo que leemos en nuestros monitores de computadoras. Hay demasiados sitios de noticias falsas, irrelevantes, que buscan que la gente entre a ellos porque viven en base a las visitas y clicks de los usuarios de la red. Hay sí, mucha gente ingenua y tonta que cree cuanta cosa lee por Internet pero aún así, me parece que los pros de la red sobrepasan por mucho a los contras que podamos hallar.
Así entonces, a pesar de lo que diga Eco, Internet, las redes sociales y la multitud de servicios que ahora tenemos literalmente al alcance de los dedos, han hecho un mundo más comunicado, más informado y quizás poco a poco, más democrático. Hoy en día podemos plasmar nuestras ideas directamente en blogs, en foros de discusión, en los comentarios de los portales y en las redes sociales prácticamente de inmediato y sin ningún tipo de censura. Y eso es de agradecerse, porque eso hace que el mundo sea un poquito más justo.
Precisamente gracias a las redes sociales, Facebook y Twitter, tenemos la posibilidad de leer a mucha gente que tiene cosas que decir. Hace ya tiempo descubrí entonces que había una serie de cápsulas de sabiduría –por decirlo de alguna manera, que muchas veces sus autores ponían en estas redes sociales. Y de pronto se me ocurrió que sería interesante ir copiando las mismas y publicarlas en mi cuenta de Twitter (@morsa). Poco a poco el acervo de frases inteligentes, simpáticas, irónicas, sarcásticas, empezó a crecer en mi “línea de tiempo” (timeline), de Twitter. Noté que empezó a subir la gente que seguía mi cuenta y me percaté entonces precisamente de la bondad de un sitio de “microblogging” como lo es Twitter, pues en apenas 140 símbolos, letras, se puede colocar una idea que nos haga reflexionar a quienes la leemos o nos saque al menos una carcajada.
Pasaron un par de años y noté que el cúmulo de frases que había copiado de otros sitios, de portales, de redes sociales, etcétera, daba ya suficiente material para armar un pequeño librito que son estas cápsulas de sabiduría por Internet, sabiduría tuitera. Podemos encontrar frases irónicas como “Hace un mes compré en Internet el ‘Manual del Estafador’, recopila las mejores técnicas para engañar incautos. No me ha llegado”, que sin duda dice más que lo que dicen las palabras o bien, reflexionar sobre la muerte: “Morir es como dormir, pero sin levantarse a orinar”, que desde luego busca ser graciosa.
En esta obra podemos pues hallar muchas frases, las cuales no tienen un autor, sino que son producto de una reflexión, de un chiste, de una gracejada de alguien y que se empezó a transmitir en las redes sociales. Hay otras que sí tienen autor y cuando se ha podido identificar al mismo, se ha puesto su nombre. No obstante, en alguna medida esta recopilación de frases tuiteras es parte de este conglomerado que somos los usuarios de Internet. Si alguien piensa que no se le dio su crédito, por supuesto puede escribirme para que en siguientes ediciones de esta obra –si las hay– se le dé el crédito a quien lo merece.
Es importante también aclarar que las frases recolectadas no están por temas, sino que simplemente se han colocado en la medida que han ido apareciendo en la red, es decir, no están catalogadas de ninguna manera. Aparecen en el orden que han sido copiadas, en donde las primeras que va a leer son las más recientes. Las últimas páginas del libro contienen las primeras frases recopiladas.
Cabe decir que aunque la mayoría de las frases caben en 140 caracteres, en algunos casos he decidido poner por ejemplo, signos de admiración o de interrogación que abren, que muchas veces omitimos por la restricción precisamente de estos 140 símbolos. La intención es que la idea quede no sólo clara sino bien escrita.
Finalmente, si quien lee este librito encuentra frases que le hagan esbozar una sonrisa, será suficiente premio para este autor que se le ocurrió esto de recopilar esta sabiduría tuitera sin pensar que llevaría a la postre a una interesante y simpática colección de frases, las cuales nos pintan de alguna manera en cómo somos los seres humanos en este mundo lleno de tanta tecnología que no hace muchos años era impensable.
Pueden descargarlo de este enlace (100 descargas o hasta el 1 de febrero del 2016): https://www.hightail.com/download/ZWJVT2pPd0E5NVc1eDhUQw