Cuando Apple presentó iOS 6, saltó a la vista de muchos la falta de dos aplicaciones nativas que antes se mostraban en el listado de la interfaz: YouTube y Google Maps. La primera, pudo ser descargada por los usuarios posteriormente, pero la segunda se quedó atrás, dando paso al nuevo software de Apple con el que se tenía pensado prescindir del conocido programa de Google.
Lamentablemente, muchas personas comenzaron a mostrar su molestia frente a una aplicación que parecía no haber sido concluida antes de su lanzamiento; en la pantalla, uno podía ver imágenes 3D deformes, ubicaciones incorrectas, falta de detalle en los planos, entre otros problemas.
Apple aceptó su error y prometió hacer lo que fuera necesario para repararlo. Con la competencia tan importante que supone Google Maps para la empresa de Cupertino, habría que hacer un esfuerzo mayúsculo para levantar un producto que fue desarrollado desde cero, pero que no alcanzó la madurez suficiente antes de ser presentado a los usuarios.
Uno de los temas en los que se pensaba que podría afectar el error de Apple fue en las ventas del iPhone 5; no obstante, la realidad fue que el dispositivo se vendió tan bien como se tenía previsto, llegando a tener una demanda particularmente buena en diversas regiones donde se vendió.
Ahora que Cue quedó a cargo de reestructurar la aplicación en cuestión, supuestamente decidió hacerlo en diversas áreas, incluso removiendo al responsable del defectuoso producto anterior que tantos ataques le ha valido a la marca, según reporta Bloomberg.
Otro de los pasos que ha tomado Eddie es adquirir la asesoría de expertos en la materia que son ajenos a Apple, además de pedir a empresas como Tom Tom que reparen la información que proveen a Cupertino para mejorar las capacidades de software como la navegación guiada y locaciones representativas del mundo.
Adicionalmente, se ha dicho que Google en realidad estaría desarrollando su propia versión de app para iOS, que tendría navegación guiada y un modo 3D de visualización de mapas. Las probabilidades de que eso sea cierto siguen siendo altas, toda vez que el entorno móvil de Apple es un mercado atractivo que Google no querrá dejar ir.
Referencia: Ars Technica, Bloomberg