Si quien me lee ha seguido alguna vez el regreso de una nave del espacio a la Tierra, sabrá que en el reingreso se puede llegar a unas 5 veces la velocidad del sonido, lo que genera un plasma ionizado supercaliente alrededor de la nave, que bloquea las comunicaciones de radio unos pocos minutos. Este problema se ha tenido por años, pero ahora un grupo de investigadores de China, del Instituto Harbin de Tecnología, han desarrollado un nuevo método de lidiar con el problema y mantener las comunicaciones.
De acuerdo a los físicos Xiaotian Gao y Binhao Jiang, de dicho instituto, se podría rediseñar la antena de la nave espacial y hacer posible mantener las comunicaciones a través de la resonancia en el plasma que envuelve el vehículo al momento del reingreso a la atmósfera terrestre. Esencialmente esto implica convertir la nave espacial y el plasma en un condensador en el circuito de la antena. Esto haría que el escudo de la nave actuara como un inductor con lo cual, juntos, crearían un circuito resonante.
«Una vez que la resonancia se ha alcanzado, la energía puede ser cambiada entre ellos sin pérdida, como si fuese capacitancia e inductancia real de un circuito», dice Gao. «Como resultado, la radiación electromagnética puede propagarse a través de la capa del escudo y el plasma como si estos no existieran». De acuerdo a los investigadores, el truco consiste en mantener la capa y el escudo protector del plasma en distancias menores a las longitudes de las ondas de radio. Sin embargo, Gao cree que es posible ajustar la antena de la nave para compensar este hecho. «No sabemos exactamente las propiedades de la capa de plasma, pero sí necesitaríamos saber los rangos para estas propiedades», menciona Gao. «El sistema podría ajustarse automáticamente por lo que solamente tenemos que conocer los rangos para estar seguros de que este sistema pueda trabajar adecuadamente», concluye.
Este no es el primer intento de resolver este antiguo problema, pero el equipo dice que su método es más ligero y simple y no depende de la forma de la nave. Los investigadores creen que el método podría usarse además en naves a velocidades hipersónicas, misiles y los ICBMs (InterContinental Ballistic Missiles).
Referencias: