Siempre ha habido innovaciones en cuanto a la forma en que nos divertimos, pues alrededor del mundo ha habido ideas impresionantes para revolucionar el concepto de los bares, restaurantes y hoteles. Sin embargo, Guinness, la compañía cervecera irlandesa, se prepara para celebrar su 250 aniversario con la adaptación de un viejo submarino para convertirlo en un bar que navegue la costa de Suecia y más allá. Ya están registrados los primeros invitados a este viaje, ¿funcionará?
La iniciativa fue tomada por la compañía constructora Jump Labs de Inglaterra, quien se encargó de adaptar un submarino en un bar con todas las comodidades del siglo XXI, enfrentándose al mayor reto del diseño: Meter las barras, mesas, equipo y otras piezas necesarias por una pequeña escotilla, cuidando el más mínimo detalle de los procediminentos de seguridad originales de la nave.
Esta idea forma parte de la campaña ‘Alive Inside’ misma que incluye un concurso patrocinado por la compañía irlandesa para ganar un viaje dentro de la nave.
Para asegurar la comodidad (y seguridad) de todos los pasajeros, los responsables del diseño utilizaron una especie de concha de plástico reforzado con vidrio que cubre el interior original del submarino para convertir lo que solía ser un control de mando, en espaciosas ‘habitaciones’ con acomodación de cinco personas.
Durante el viaje (que parte del puerto de Estocolmo, en Suecia) la nave se mantiene a una profundidad segura para evitar que los pasajeros sufran de algún ataque debido a las burbujas creadas por la oscura cerveza a la hora de subir a la superficie. Cómo verán, todo se mantiene en los estándares internacionales de seguridad para mantener a los pasajeros cómodos y felices.
El interior del submarino está decorado para parecer lo que en realidad es, una especie de club nocturno turístico que viaja bajo del mar. ¿A alguien le apetece tomarse un trago? No olviden las pastillas para el mareo.